Padel Spain .- Se ha tenido que esperar a la cuarta cita de la temporada para que se repitiese una final en el Cuadro Femenino. Tras una apasionante jornada de semifinales, en la que se cumplieron los pronósticos, Eli y Patty dejaron muy claro que su evolución sigue yendo a más, que se sienten con moral para superar a cualquiera y que desean tomarse su revancha deportiva ante las actuales número 1 del mundo.
En un choque muy igualado, como era de esperar, las dirigidas por la brasileña Neki Berwig evidenciaron su frialdad y seguridad para eliminar a las gemelas Sánchez Alayeto por un apretado 6-4 y 7-6.
En el primer set lograron un rápido break al inicio que supieron conservar hasta el final. En el segundo, se tuvo que esperar hasta la muerte súbita, que se vio marcada por una segunda advertencia que recibió Mapi por estrellar la pala contra el cristal y que motivó pasar del 4-3 al 5-3 en un suspiro.
El árbitro fue el centro de todas las críticas, el público no se mostró de acuerdo con la decisión, las Súper Gemelas se descentraron y ya no hubo reacción posible… Eli y Patty decidieron estar ausentes de toda la polémica, no perdieron ni la concentración y cerraron el partido con una tímida celebración, un saludo con sus rivales y el camino hacia la final con la sobriedad habitual en la murciana y la riojana.
Quieren ser profetas en casa
Como no podía ser de otra manera, toda la atención se centró en la segunda semifinal… Y como tampoco podía ser de otra manera, el público malagueño se volcó con su jugadora, Carolina Navarro, y ésta no defraudó. En un encuentro con dos sets muy diferentes, las grandes dominadoras del ranking femenino vencieron por 7-6 y 6-1 a Cata Tenorio-Valeria Pavón.
Navarro y Reiter supieron superar tanto a sus rivales como a la presión de jugar en casa, ante su público, que lo único que aceptaba era la victoria… Cumplieron con creces al derrotar a unas complicadas oponentes, que se entregaron al máximo en el primer parcial pero que desaparecieron del ‘mapa’ en el segundo.
Cecilia fue una muralla infranqueable. La argentina estuvo acertada y muy segura, sobre todo en el segundo set. La pierna maltrecha de Carolina no fue impedimento para que volviese a mostrar los mejores golpes de su repertorio. El público ayudó desde las gradas y, con ese aliento, todo fue más fácil.
En el primer set cogieron rápida ventaja con un break en el tercer juego aunque terminaron sufriendo. Navarro sacó en el décimo juego para cerrar el set pero en ese instante surgió la mejor versión de sus rivales. Dos juegos casi perfectos de Vale y Cata les ayudaron a ponerse por delante en el marcador con un juego en blanco.
Ya en el tie break, la figura de Cecilia brilló con luz propia. Sus acertados y siempre bien elegidos golpes contrastaron con los errores no forzados de sus adversarias. Con esa ventaja en el marcador, las favoritas se liberaron de la tensión y el segundo set fue una historia muy distinta. Así lo confirmó el rotundo y contundente 6-1 con el que se puso fin a la contienda.
La malagueña y la argentina lo celebraron primero con su gente, luego con su staff técnico y, para terminar, se volvieron a fundir en un abrazo. Muestras de alegría por volver a una final que, además, será muy especial para una Carolina Navarro que querrá dejar el título en casa… Enjoy the Game!!!
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