Dos partidos con intensidad y emoción pero con desenlaces totalmente opuestos. Esto bien podría ser el resumen de lo que nos dejaban las semifinales del Open de San Lúcar de Barrameda en A1 Padel. Dos choques que nos dejarán, además, una final inédita.
Diego Ramos y Agustín Torre se reencontraban no hace mucho tras un pequeño periplo separados y, tras unas mínimas dudas iniciales, han vuelto por sus fueros. Garra y pasión, trabajo absoluto, y en Cádiz están ofreciendo su mejor versión. Ahora tienen ante sí la posibilidad de obtener su primer título como pareja, algo que sería una enorme recompensa a su esfuerzo (muy merecida por otra parte).
Frente a ‘Tito’ Allemandi y Ramiro Pereyra se trabajaron un duelo que vencieron en dos tie breaks, una oda al aguante en la que las dos parejas dieron todo lo que tenían, corrieron, se desgastaron y pelearon con ahínco cada pelota. No consiguieron hacerse daño en los 12 juegos de cada set y tuvieron que recurrir a una muerte súbita, o mejor dicho a dos, para conocer a los vencedores.
Esta vez la suerte recayó en el lado de Ramos y Torre, quienes lo buscaron un poco más y tuvieron algo más de suerte cuando más falta hacía (7-6 y 7-6).
La otra semifinal, por contra, poca historia tuvo. Gonzalo G. Alfonso y su recién estrenado número 1, acompañado de ‘Tolito’ Aguirre, se medían a la sorpresa del torneo, Santiago Pineda y Cristóbal García, a quienes las alturas de competición y también el desgaste les jugaron una mala pasada.
Pineda y García llegaban con la moral por las nubes pero se dieron un baño de realidad; unas semifinales, antesala de la pelea por el título, son palabras mayores, máxime ante una dupla que está acostumbrada a jugarlas torneo sí, torneo también. Alfonso y Aguirre dieron una exhibición de golpes y estrategia, de pegada y de magia. Mucho pádel en sus manos para romper una y otra vez el servicio de los oponentes, quienes asistieron en primera fila a un partido sin apenas errores de ‘los Mágicos’ (6-1 y 6-1).
Una cita más del calendario en la que se plantan en el domingo (han estado en todas las finales disputadas hasta el momento, con 24 partidos jugados y una sola derrota), demostrando su conjunción y talento. ¿Lograrán seguir aumentando su nómina de triunfos?