Sin duda, el año que está a punto de terminar ha sido excelente para el pádel. Un gran crecimiento a nivel de aficionados, torneos amateurs, seguimiento del circuito profesional, etc. El 2018 ha sido una gran temporada que nos ha dejado varios nombres propios que conviene recordar.
Los dos primeros son, obviamente, los de los números 1 de ambos cuadros: por un lado las gemelas Mapi y Majo Sánchez Alayeto, ganadoras de cinco títulos, habiendo perdido únicamente 10 partidos en todo el año y con un total de 13 finales este año. Dominadoras del cuadro femenino a pesar de la gran igualdad reinante en el mismo.
Por el otro lado, Sanyo Gutiérrez y Maxi Sánchez, autores si cabe de una gesta mayor, quitarle a Fernando Belasteguín (y a Pablo Lima) su cetro mundial, ese que llevaba más de tres lustros en su poder (hay que tener en cuenta también su lesión) y que a base de trabajo, esfuerzo y victorias, hasta ocho en la temporada, han logrado hacer suyo. Bravo por ellos.
No podemos igualmente olvidar a Juan Martín Díaz y a Alejandra Salazar, dos jugadores que han vuelto al mejor nivel posible tras sus respectivas lesiones, uno sabiéndose adaptar rápidamente a su nuevo compañero, Paquito Navarro (varios si tenemos en cuenta que también ha jugado con Juan Lebrón) brillando a un gran nivel y volviendo a dejar detalles de sus inimitables reflejos, y la otra terminando el año con el título de ‘Maestra’, con seis títulos en su vitrina y recuperando el segundo puesto en el ranking de parejas. Que se prepare el 2019 porque promete guerra.
Un año que pone ahora fin con innumerables cambios de parejas que están suponiendo ya que el efecto dominó haya empezado y no tenga aún final, con muchos actores y actrices involucrados (este año más chicas que nunca), con nombres propios como el propio Juan Martín Díaz (quien jugará con Agustín Tapia), Matías Díaz, Ale Galán, Alejandra Salazar, Marta Ortega, Paquito Navarro, Cristian Gutiérrez, Lucho Capra, Victoria Iglesias…
A ello hay que sumarle, por supuesto, la irrupción (y confirmación de varios jóvenes que han sentado importantes bases de cara al futuro así como de parejas que este año han dado un importante salto de calidad y que para la temporada que está pro venir tendrán que terminar de materializar ese plus con, si cabe, más y mejores actuaciones. En este grupo no podemos olvidar el gran año de Uri Botello junto a Javi Ruiz (ganador este último del premio al ‘Jugador Revelación’ en los PWPA 2018), Bea González (excelente temporada la suya y también nombrada Jugadora Revelación), Aranzazu Osoro, la continuidad de Juan Tello y Fede Chingotto, la vuelta a las pistas tras una larga lesión de Agustín Tapia, el vistoso pádel que realizan Jorge ‘Coki’ Nieto y José Rico…
Y para el final, y no por ello menos importante, hay que hablar también de las sombras de este deporte porque, lógicamente, no todo es positivo. Este ha sido un año de muchas incertidumbres, con la posibilidad real de dos circuitos que finalmente no se llevó a cabo y que quizá hubiese supuesto un paso adelante para este deporte, que realmente está excesivamente cerrado y encorsetado por una única empresa y que podría haber ayudado a que llegue más y mejor al exterior y que mejore en cuanto a difusión y premios para los jugadores.
Al final, como decimos, esta opción procedente de Monte-Carlo International Sports (y otra posterior más oscura y dudosa si cabe desde tierras valencianas) quedó en nada, y todo se mantuvo como hasta ahora, con los jugadores teniendo que aceptar la oferta de renovación de Estrella Damm y echando marcha atrás los que apoyaron el otro circuito (veremos si de cara al año próximo salen a la palestra las posibles sanciones que algunos han pedido para sus compañeros). Ojalá todo esto sirva para que, de una vez por todas, el circuito se dé cuenta que tiene que contar y apoyarse en todos, que todos somos actores de un mismo espectáculo y que todos intentamos ayudar para que el pádel crezca y mejore y únicamente de esta manera ya que, por fortuna o por desgracia, medios que realmente hablemos de pádel en exclusiva somos muy pocos, conseguiremos situar a este deporte donde merece.
A esto hay que añadir las mareas turbulentas en las que nadaba la Federación Española de Pádel desde hace un tiempo, con una moción de censura planteada contra su presidente, Alfredo Garbisu, por parte de las Autonómicas que en su momento le dieron apoyo, movidas por intereses estratégicos, comerciales y de poder y que enturbiaron una buena gestión y un avance del pádel federado nacional que, por suerte, parece haber llegado a su fin, dejando así que este deporte (al menos por el momento), pueda proseguir con su caminar.
Todos estos temas (que podríamos haber explicado y detallado mucho mejor y muchos otros que seguro nos hemos dejado en el tintero), son los más destacados de un año que ha vivido constantes altibajos deportivos y extradeportivos que parecen haber concluido y que nos han dibujado un interesante comienzo de 2019. Esperamos y deseamos que el año próximo se hable únicamente de pádel, de los resultados deportivos, no de negociaciones turbias, de tejemanejes ocultos y de rumores que oscurezcan y afeen este bello espectáculo.
2 comentarios en «El 2018 pone fin a un año de altibajos en el pádel»
Una pregunta, cual fue el circuito desde tierras valencianas que quiso competir con Wpt? La página web es excelente. Saludos desde Sudamerica
Hola Diego. No llegó siquiera a circuito, fue una propuesta de un promotor o empresario de la Comunidad Valenciana, que estaba metido previamente en el proyecto de MCIS, pero cuya difusión de lo que quería hacer fue bastante extraña pues apenas se habló de ello y poca gente lo conocía.
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