La temporada 2025 traerá doble novedad en la figura de Ramiro Moyano. El jugador argentino, que por condiciones estaba llamado a ser uno de los destacados a lo largo de su carrera, no ha terminado nunca de explotar del todo, en muchas ocasiones golpeado por las lesiones, pero ahora busca redimirse totalmente y explotar todo su potencial.
Así, tras muchos años en el revés, ahora ha decidido cambiarse al drive en busca de una nueva oportunidad y, además, lo hará con un jugador joven al que este año hemos visto despuntar, Andrés Fernández-Lancha.
El madrileño, nacido en 2005, tuvo diferentes compañeros el pasado año (Mario Ortega, Enzo Jensen, José Antonio Gª Diestro, Alejandro Jerez…), llegando incluso a semifinales en el FIP Rise de Córdoba y a cuartos de final en el Madrid P1, sin duda sus mejores resultados del año junto a tres semis más en torneos del CUPRA FIP Tour y dejándose ver con actuaciones de gran calado.
Eso es lo que ha hecho que Moyano se fije en él y que quiera tenerle al lado como un seguro en el revés, un jugador que puede desequilibrar y que suma muchos puntos en los partidos. Una nueva prueba de jugador experimentado con otro con gran recorrido por delante.
Os deseamos mucha suerte y muchas victorias.