No ha sido en un Major ni tampoco en un P1, pero al menos Franco Stupaczuk y Miguel Yanguas han conseguido tocar entorchado en un torneo en el que eran favoritos y, por supuesto, tenían toda la presión sobre ellos.
Una cita para demostrar que su unión puede dar frutos y que se juntaron para brillar. Un respiro a sus aspiraciones, una bocanada de aire fresco y, por supuesto, quitarse un enorme peso de encima.
EL argentino y el español han conquistado el NewGiza P2 ante Lucas Bergamini y Javi Garrido, dupla que venía realizando un torneo fantástico (y reafirmando un concepto de juego que está en claro crecimiento), prueba de ello es que habían dejado fuera a los nº2, ‘Coki’ Nieto y Jon Sanz.
Sin embargo, a pesar de su buen hacer, en el primer envite de la final no aparecieron en exceso (o no les dejaron), especialmente un Stupa que se convirtió en líder absoluto en la tarea anotadora (aportó un total de 29 winners en el partido). Esto, unido a que Yanguas supo ajustarse a la perfección a su papel de creador de juego y abridor de espacios y que no se vio superado por el pádel-control de Bergamini, fue clave para que rápidamente pusieran tierra de por medio y rápidamente cerraran el parcial con un 6-3.
Más miga tuvo la segunda parte, en la que las prestaciones del brasileño y Garrido subieron y se pudo ver por fin su juego y, sobre todo, una batalla táctica en la que todos sumaban, todos corrían y le metían mucha rapidez a las piernas e intensidad al juego, un duelo de ida y vuelta que acabó obligando a irse al desempate tras no obtener un vencedor claro en los 12 juegos disputados, y eso que Javi y Lucas tuvieron al resto bola de break con 3-4.
El tie break volvería a dejarnos una versión sólida del chaqueño y del malagueño, cubriendo perfectamente los espacios, sabiendo asociarse y anotando una y otra vez para llegar a estar 4-0 arriba y luego, con 6-2, dar la puntilla final (6-3 y 7-6).
Un nuevo triunfo en tierra de faraones para Franco Stupaczuk (quien ya lo consiguió junto a Pablo Lima en El Cairo en 2022) y un doblete en el mismo torneo para el bueno de Carlos Pozzoni, un hito que sólo había conseguido este año Jorge Martínez.