Fernando Belasteguín y Pablo Lima han comenzado a escribir su historia en el mundo del pádel. Primer torneo que juegan de principio a fin y primera victoria. Han tenido que esperar hasta Argentina para hacerse con el primer entorchado de su vitrina compartida, pero la espera ha merecido la pena.
Enfrente tenían a los número 4 del mundo, Maxi Sánchez y Sanyo Gutiérrez, a los que vencieron por 5-7, 6-2 y 6-2, en un choque a la altura de las expectativas y con una remontada que los aficionados corearon a la finalización de cada punto.
El Boxing Club se llenó con los casi 3.000 aficionados que permitían sus localidades y todos ellos pudieron ver por sus propios ojos el mejor espectáculo en lo que al pádel se refiere; partido de choque, vibrante, tenso y nervioso en muchos momentos, cómo en otros pero con mucho, mucho espectáculo.
Los cabezas de serie número 1 completaron su primer torneo juntos tras la lesión del brasileño Lima y estrenaron su palmarés. Para Belasteguin es el tercer título consecutivo tras haber ganado los Open de San Fernando y La Palma en compañía de Willy Lahoz, pero para el brasileño es su estreno y seguro que ahora quiere más.
Tal y como sucedió en semifinales, la pareja número 1 comenzó cediendo el primer set para luego destrozar a sus rivales en los dos siguientes, sin dejarles descanso ni oportunidad de cambiar el guión del partido. Bela volvió a cometer muchos errores no forzados en el inicio del partido, el que más de los cuatro, pero a pesar de ello ninguna de las dos parejas tuvo opciones de break hasta el noveno juego, cuando Sanyo y Maxi salvaron la primera.
Todo pintaba para la definición en el tie break, pero en el duodécimo juego, en la única opción de ruptura que tuvieron los puntanos en todo el set, llegó el break al saque de Lima.
Pero este mazazo de perder la primera manga en el último suspiro, más allá de afectarles anímicamente, parece ser la inspiración que la dupla argentino-brasileña necesitaba para reaccionar, para convertirse en rivales peligrosos tanto en la red como desde el fondo de la pista.
Por eso no extrañó que rompieran el servicio de Sanyo en el interminable primer juego del segundo set y no tuviera prácticamente fisuras hasta conseguir un nuevo break en el séptimo juego al saque de Maxi.
Con empate a un set para cada lado de la pista, el tercer set comenzó con rotura de saque a favor de los números 1 y en detrimento de Sanyo Gutiérrez, con asombrosa facilidad y salvando, posteriormente, una bola de break en el cuarto juego.
Lima siguió como durante todo el partido aguantando el peloteo continuo a su esquina, no se apartaron Maxi y Sanyo de esa estrategia, pero se encontraron con un muro porque el brasileño estuvo inconmensurable en la defensa.
Como si fuera una repetición de lo ocurrido en el segundo set, nuevamente volvieron a romper el saque de Maxi en el séptimo juego. Quedaba el último paso para comenzar a celebrar el primer título juntos, para ver la euforia de una emocionado Pablo Lima que levantó los brazos al cielo y dejó correr alguna lágrima al recordar el apoyo de su mujer Paula en estos duros meses de recuperación.
La historia de Bela y Lima comenzó a escribirse en tierras argentinas y el futuro les sonríe.
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