De regreso de su «aventura» americana, Matías Díaz se centra ya 100% en su nuevo proyecto junto al sevillano Paquito Navarro. Han sido de las parejas más madrugadoras en comenzar la pre temporada. Bajo las órdenes de Ramiro Choya se pusieron manos a la obra en la última semana de enero, para comenzar a labrar con ilusión esta nueva pareja que está llamada a ser una de las grandes protagonistas de este 2015.
El jugador de Star Vie hizo hincapié primeramente en la experiencia vivida durante estos días en Miami Beach, donde participó de la primera exhibición World Padel Tour en tierras estadounidenses junto a otros compañeros como Sebastián Nerone, Fernando Poggi, Hernán ‘Bebe’ Auguste o Fede Quiles, entre otros: «Iniciativas como esta son las que permiten promover este deporte en países donde aún no está muy desarrollado y dar el salto a Estados Unidos sería muy importante. Esperemos que sea la primera de otras muchas que podamos realizar en el futuro en otros países, como Alemania o Inglaterra, para intentar que cada día más gente conozca el pádel»,.
Hablando ya directamente de esta nueva etapa junto a Paquito Navarro, no escatimó en elogios hacia el sevillano tras el gran año que ha realizado y consideró que «la combinación puede ser muy buena. Ambos tenemos cosas para aportarnos, yo un poco más de experiencia y Paquito toda esa potencia que tiene».
Cuando a final de temporada Paquito consiguió dos títulos consecutivos junto a Maxi Grabiel y mucha gente ya pedía que siguieran juntos, entre las propias parejas hubo bromas y Matías reconoció que «en algún momento se te pasa por la cabeza que puede ocurrir, pero Paquito mantuvo su palabra, en ningún momento me insinuó nada y entonces no había nada que hablar».
El lunes 26 de enero comenzaron los trabajos en equipo, Matías en la parte físico con Roberto Bourdet y Paquito con Jorge Martínez, pero ambos en la parte deportiva con Ramiro Choya. «Hemos trabajado un poco en pista, la parte táctica, algunos golpes y dentro de dos semanas aproximadamente ya se viene la parte más activa, con partidos contra otras parejas, para ir cogiendo ritmo de competición», explicaba.
Al echar la vista atrás y hablar de sus anteriores parejas, argumentó que «siempre me he ido acoplando a las parejas que he tenido y por eso el cambio en mi forma de juego. Con Miguel no me animaba o pegaba menos, pero el deporte va evolucionando y no te puedes quedar atrás. Con Bebe trabajé un poco más la parte creativa y ahora en mi última etapa con Cristian estuve un poco más agresivo en los tiros, era una necesidad en la pareja».
Precisamente al analizar los dos últimos años junto a Cristian Gutiérrez, dijo que «los resultados llegaron muy rápido el primer año, salimos de pareja 7 y acabamos en la tercera posición. El año pasado tal vez pecamos un poco de no mantener la misma intensidad de entrenamiento, yo tuve más lesiones y no rendimos al mismo nivel. Pero en el global fueron dos años muy buenos, aprendí mucho con Cristian, me ayudó a evoluciona en mi juego y además hice un amigo, que lo más importante».
A partir de mañana vuelta al trabajo, a comenzar a acoplarse a su nueva pareja, a entrenar duro para una temporada apasionante que seguro los tendrá como protagonistas.
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