Podría decirse que la unión de Paquito Navarro y Maxi Grabiel son un matrimonio de conveniencia, una unión de la que ambos se benefician pero que, antes o después, terminará. Aunque esto es así para lo que queda de 2014, hay que mencionar que, a pesar de ello, la química reinante entre ellos es estupenda y los resultados que están obteniendo, mucho mejores de lo esperado.
Por ello, desde la firma Middle Moon, encargada de fabricar el arma con la que el jugador español salta a pista, han querido valorar la buena actuación de su pupilo en las últimas semanas.
Son la pareja del momento. Están en boca de todos los aficionados al pádel por haber inyectado una gran dosis emoción al circuito profesional. Consiguieron ganar el torneo de Valencia ante los rivales por antonomasia, Juan Martín Díaz y Fernando Belasteguín. Era la primera vez que Paquito Navarro ganaba a «los Reyes» y lo hacía logrando también su primer título World Padel Tour.
«Es el objetivo cumplido de 25 años de sueño y trabajo. Es una felicidad tal que aún no acabo de aterrizar. Lo único en lo que puedo pensar ahora es en repetirlo cuanto antes», afirmaba por entonces el sevillano.
Y así ha sido. Lo han vuelto a conseguir en San Fernando. Llegaban con la motivación de haberlo logrado en la prueba anterior y repitieron hazaña. Tras una intensa final de más de cuatro horas de duración, Paquito y Maxi ganaban 7-5, 5-7, 7-5 y 7-6 a Maxi Sánchez y Sanyo Gutiérrez. De esta forma, suman a su palmarés dos de los tres torneos disputados como dupla con un sabor muy especial por la dificultad del partido definitivo.
«Aún no me ha dado tiempo a disfrutarlo porque inmediatamente nos hemos venido a Argentina. Acabé reventado y a día de hoy sigo recuperándome. Pero la alegría y la satisfacción son tan grandes que merece la pena con creces».
Sorprendente adaptación
Se apunta a la ausencia de presión como la causa de este «terremoto» que Paquito y Maxi han supuesto para la estabilidad del circuito. Lo suyo fue un matrimonio de conveniencia provocado por el baile de parejas que, finalmente, se ha convertido en una unión imparable. Para explicar el secreto de esta inmejorable adaptación en la pista, el jugador de Middle Moon apunta también a la buena relación que ha habido entre ellos desde el principio: «Hay con personas que, aunque las hayas conocido hace poco, tienes más confianza y te llevas mejor que con gente que llevas viendo toda una vida. A Maxi y a mí nos ha ocurrido esto. Casi sin querer, hemos congeniado de escándalo y todo nos sale de cara».
En 2015, caminos separados
Tras este gran debut como pareja, son muchos los que cuestionan su continuidad de cara a 2015, a pesar de que ambos tienen compromisos con otros jugadores: Paquito con Matías Díaz y Maxi con Cristian Gutiérrez. Los dos jugadores son tajantes en este sentido y, aunque aseguran que están disfrutando mucho juntos, el próximo año continuarán con sus planes por separado.
«Él está encantado conmigo y yo con él. Pero también estamos súper ilusionados con nuestros proyectos para el 2015. Además, también tengo claro que, de no ser por Matías Díaz, todo esto que me está sucediendo probablemente no pasaría. Él fue quién lo desencadenó».
En estos momentos, están centrados en el torneo que disputan actualmente en Córdoba (Argentina) y, por supuesto, sueñan con el Master Finals. A la prueba más importante de la temporada quieren llegar con la misma intensidad que a los dos últimos torneos: «Nuestra intención es disfrutar, jugar sin presión y darlo todo, con mucha confianza».
A estas alturas, lo que queda claro es que para esta pareja, nada es imposible.
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