Queríamos ver a las dos mejores parejas del ranking en la final, queríamos pádel deluxe en el duelo por el título y las queríamos a ellas de tú a tú y las vamos a tener. No les ha sido fácil llegar tras las dos espectaculares (y bien largas) semifinales, pero ya están aquí.
La Cartuja tendrá, este domingo, a las parejas que ostentan todos los títulos este año (Catar y Acapulco para las nº1 y Acapulco y Bruselas para las nº2), momento para desempatar y para ver si la distancia al frente se mantiene o amplía ligeramente o bien se sigue acortando.
Duelo de estilos que tendrá como protagonistas a Ari Sánchez y Paula Josemaría tras estar prácticamente dos meses sin estar presentes un domingo y a Bea González y Delfi Brea, en clara línea ascendente y buscando su primer triplete consecutivo.
Las líderes del ranking se medían a Claudia Fernández y Gemma Triay, a quienes ganaron en Doha pero contra quienes perdieron en Bruselas hace muy poco, por lo que había cuentas pendientes. Cuentas que empezaron con las chicas de Ángel González mandando y dominando en un primer set con muchas alternativas al saque, pues hubo hasta nueve oportunidades de break de las cuales Josemaría y Sánchez obtendrían tres (de cuatro opciones) y Gemma y Claudia tan solo una (de cinco posibles), lo que marcaría la diferencia fundamental en esta primera entrega en la que corrieron más las líderes del ranking y llegaron antes a la meta (6-3).
Lejos de calmarse la situación, Triay y Fernández regresaron del banquillo con ganas de marcha y de nuevo volvieron a poner en muchos problemas a sus oponentes al resto, otra vez con cinco oportunidades de romper y otra vez sin aprovechar sus ocasiones, consiguiendo impactar sólo una de sus balas en la línea defensiva de las nº1, aunque en esta ocasión les sería suficiente para, ante unas menos peligrosas Josemaría y Sánchez mandar el duelo al tercer episodio (4-6).
Esta vez, en la tercera parte de la saga, no hubo discusión. Ari y Paula cogieron el mando de las operaciones y no permitieron la más mínima oportunidad de rebelión a sus oponentes, tomando distancia al aprovechar la única opción de break que tuvieron. Efectividad total para cerrar la eliminatoria con un 6-3, 4-6 y 6-3.
Y si este partido fue largo y sobrepasó las dos horas de duración, la otra eliminatoria se fue más allá de las tres horas. Alejandra Salazar y Tamara Icardo fueron rivales más que dignas para complicarse la vida al extremo a Bea González y Delfi Brea.
Choque de igualdad absoluta en el primer, segundo y tercer parcial, un duelo de tú a tú, de poder a poder demostrando que se conocen y saben cómo hacerse daño, algo que no consiguieron en exceso al resto en los dos primeros sets, pues apenas hubo ocasiones de break y se acabó por decidir todo en el último tramo, donde el arriesgarse tuvo premio extra primero para Brea y González y luego para Salazar e Icardo.
Campeaba en el luminoso un 4-6 y 6-4 que convirtió en el tercero el partido en una deliciosa locura, en una tumba abierta de roturas (3 de 5 para Tamara y Ale y 4 de 8 para Delfi y Bea) a la que se sumó un inicio fulgurante y sobresaliente de Tamara y Alejandra, poniendo un 0-5 en el marcador y noqueando en la mandíbula a sus oponentes; sin embargo, todavía no sabemos de dónde, pero las chicas de Jorge Martínez sacaron fuerzas, se rearmaron y fueron capaces de pasar de estar en coma y pidiendo oxígeno a elevarse por encima del estadio, a crecer sin freno y no tener resistencia alguna, anotando siete juegos seguidos, uno tras otro, para sortear el tie break y adjudicarse su presencia en la finalísima de este domingo (4-6, 6-4 y 5-7).