Capaces de días de rendimiento altísimo y de otros en los que no están tan acertados, de un juego sublime, eléctrico y de fantasía así como de dejarse ir y no encontrar soluciones. El caminar de las dos parejas protagonistas del día es, en ocasiones, idéntico y en Sevilla ha quedado demostrado.
Tras venir de un gran nivel en Bruselas, ‘Coki’ Nieto y Jon Sanz se encontraban con Tino Libaak y Leo Augsburger, efervescencia pura, la horma de su zapato, dándose un choque sublime de fuerzas en el que los argentinos serían demoledores, arrasando la defensa de Nieto y Sanz y sin permitirles estar cómodos en ningún momento en la pista.
Sevilla se les atragantó desde el minuto 1, mientras que Libaak y Augsburger, cuchillo en mano y llegando desde la previa, apenas necesitaban una hora en el 20×10 para sumar un total de siete opciones de break (consiguiendo cuatro de ellas), poniendo muchas trabas al saque de sus rivales, lo que decantaría la balanza con un 6-4 y 6-2, despidiéndoles demasiado pronto y con deberes en la maleta.
La jornada serviría para ver también (por fin) la vuelta de Fernando Belasteguín a la acción, ya con Juan Tello al lado, para medirse a otros dos que también fueron sensación en Bruselas, Miguel Lamperti y Juan Cruz Belluati y que quizá notaron de más el cansancio acumulado y las ganas y el empuje que Bela ofreció sobre la pista. Un marcador (6-2 y 6-3) que no dio lugar a mucha pelea y que sirve para empezar a ver el rodaje de una pareja que estará más que pendiente del estado físico del ‘Boss’ en cada partido.
Tres tie breaks para conseguir tres victorias. Choques de alta intensidad y, especialmente en el primero de los casos, de total paridad; y es que Miguel Yanguas y Javi Garrido sufrieron para imponerse a Javier García y Jaime Muñoz, dos jóvenes que, como ellos, están creciendo y este año ven resultados sobre la pista a su intensidad en los entrenamientos. Frutos que se convertían en un 6-4 y 7-6 muy peleado para seguir llamando a la puerta y aunque todavía no la derriban, están muy cerca, como ya les pasó en Bruselas ante Paquito y Lebrón.
Por su parte, Garrido y Yanguas mantienen su estancia como »locales» por ser andaluces gracias a su imponente pegada y a tomar los riesgos justos en el momento de la verdad.
Con un 6-1 y 7-6, Lucas Campagnolo y Javi Leal se llevaban la victoria frente a Gonzalo Rubio y Jairo José Bautista, dupla todavía en formación y aclimatación que terminó con una imagen bastante positiva pero que empezó demasiado abajo ante un Campa y un Leal que cuando entran en dinámica positiva se convierten en una pareja con muchos recursos. Una victoria que, además, emocionaba y de qué manera al brasileño, pues su abuela había fallecido hace un par de días y le sirvió para homenajearla desde la pista.
Para terminar, con otro tie break, Edu Alonso y Álex Arroyo mandaron de vuelta al hotel a Arnau Ayats y Fran Guerrero (6-3 y 7-6). La regularidad en sus resultados va a ser la clave para poder ascender en la clasificación y, sobre todo en el caso de Alonso y Arroyo, mirar hacia arriba y buscar meterse en el top 15, algo que por condiciones, juventud y despliegue pueden conseguir sobradamente. El caso es que ambas parejas pelearon con ahínco y dejando buenos momentos de pádel; dos estilos ofensivos que prometen muchas victorias y que, sobre todo, necesitan continuidad en los respectivos proyectos para seguir creciendo.
El resto de marcadores de este largo día fueron los siguientes:
Arturo Coello – Agustín Tapia vs. Pablo Lijó – José Antonio García Diestro (6-1 y 6-3)
Franco Stupaczuk – Martín Di Nenno vs. Denis Perino – Marc Quílez (6-2 y 6-3)
Javi Ruiz – Pablo Cardona vs. Fede Chingotto – Ale Galán (3-6 y 2-6)
Alonso Rodríguez – Javier Martínez vs. Nacho Sager – Salva Oria (4-6 y 2-6)
Enrique Goenaga – Teo Zapata vs. Enrique Sánchez – Daniel Santigosa (6-2 y 7-6)