Se les fue complicando con el paso de los minutos, cada vez más, cada vez más, a Maxi Sánchez y ‘Sanyo’ Gutiérrez el partido en Bruselas. Aunque la diferencia en la clasificación era más que evidente, sus rivales no cejaron en su empeño y pusieron sobre la pista todo lo que tenían, que en esta ocasión fue mucho.
Pablo García y Emilio Sánchez, proyecto temporal (a priori) de pareja, saltaron a escena en la oscura pista belga y acapararon todos y cada uno de los focos. Sin cohibirse, sin venirse abajo ni dejar nada en el tintero, hicieron naufragar a ‘los Maestros’ y les dieron un golpe tremendo.
Un partido que a priori deberían haber sacado con suficiencia se les enredó y se les volvió en contra merced no a uno, sino a dos tie breaks que perdieron (7-6 y 7-6) (el primero con más amplitud que el segundo) en un duelo en el que el saque fue factor clave, pues los sacadores mantuvieron siempre el dominio y en el que únicamente se vivieron dos oportunidades de break (precisamente para los dos argentinos) pero que no llegaron a concretarse.
Un pequeño traspiés para una pareja que debe vivir como mínimo hasta los viernes e incluso los sábados pero que, de momento, se ha despedido en octavos de final y se pondrá a reparar los errores cometidos de cara a la próxima cita.
Con mucha más suficiencia, Paquito Navarro y Juan Lebrón (esta vez sin los problemas de su debut) conseguían sacar adelante su duelo ante Javi Ruiz y Pablo Cardona, pareja que en ningún momento les puso en demasiados aprietos y no les consiguieron romper la dinámica ganadora que pusieron casi desde el principio (6-2 y 6-3).
Contraste total con lo vivido por Agustín Tapia y Arturo Coello a última hora del día ante la dupla argentina formada por ‘Lucho’ Capra y Álex Chozas; darían estos su máximo rendimiento y pondrían durante muchos minutos (o más bien durante casi todo el partido) a los nº1.
Dos horas les obligaron a estar en pista y a vencerles sin apenas margen porque salvo en el primer set en el que Coello y Tapia sí que estuvieron un pasito por encima, en el resto tanto Capra como Chozas exprimieron todas sus virtudes: una defensa imperial y una gran capacidad para cubrir pista y apretar, sobre todo en el juego aéreo. Con esa fórmula, Álex y ‘Lucho’ respondían punto por punto a lo que proponían Arturo y Agus, haciendo que tras ganar estos el primero con un 6-3, en el segundo se les complicase la resolución del partido, estando muy cerca de tocar el tie break.
Un arreón final de los argentinos lo evitó al ponerles por delante (5-7) y haciendo que, en el tercero, la batalla volviese a estar muy igualada, por más que trataba Gustavo Pratto de inculcar a sus chicos aire extra e ideas frescas desde el banquillo. A final consiguieron salvar la bala que les quedaba en el cargador a Capra y Chozas y salir indemnes para vencer con un ajustadísimo 6-3, 5-7 y 6-4.
Les costaría también mucho y ganarían con gran sorpresa, pero de manera merecida por su entrega incontestable. Miguel Lamperti y Juan Cruz Belluati se metían en la pista 2 de Bruselas para dar guerra y quebraderos de cabeza a ‘Momo’ González y Álex Ruiz y el partido tuvo no uno, ni dos, sino tres tie breaks, siendo un largometraje loco y sin final cerrado hasta el último punto.
Una exhibición de aguante, temple y de saber manejar los nervios, pues las dos parejas buscaban siempre hacer daño pero aunque lo conseguían, lo recibían en igual medida, lo que provocó que tuvieran que ser las tres muertes súbitas las que decidieran todo, además con el mismo marcador, un 7-5.
Un partido en el que, además, la pareja que sacaba conseguía prácticamente siempre su juego, pues a pesar de ver tres tie breaks solo vimos una rotura en todo el partido por pareja, lo que viene a demostrar que en Bruselas hacer breaks se vende muy caro.
En la entrega final, donde se decidió todo, la soltura de Lamperti y el cerrojo echado por Belluati desde el drive conseguirían domar a una pareja que aunque ya jugó junta, todavía está en fase de acoplamiento y, en el caso de Ruiz, de búsqueda de sensaciones tras su lesión. Aun así, cabeza muy alta para ellos a pesar de que el premio, con un 7-6, 6-7 y 7-6 fuese para Miguelito y Juan Cruz.
Franco Stupaczuk y Martín Di Nenno consiguieron un amplio 6-0 y 6-4 sobre Ramiro Moyano y ‘Xisco’ Gil al tiempo que Fede Chingotto y Ale Galán anotaron un 6-0 y 6-3 sobre Gonzalo Rubio y Jairo José Bautista. Por último, Miguel Yanguas y Javi Garrido solventaron la montaña rusa en que se convirtió su partido ante Javi Leal y Lucas Campagnolo, una pareja que cada día es más peligrosa y promete emociones fuertes este año si mantiene esta línea.
Los dos españoles necesitaron un 6-3, 3-6 y 6-2, soltándoles en el último set, para poder avanzar en el torneo y llegar a cuartos de final.