La primera entrega de los chicos en Leganés tuvo varios focos de atención, con pelea y fuerzas igualadas, pero la de este domingo le ha ido a la zaga y pocos han sido los partidos en los que se ha permitido que haya poco desgaste y en los que una pareja ha tomado el mando desde el principio.
Leganés parece que ha empezado con fuerza y poniendo el listón alto.
Lo demostraron José Román y Eneko Arija desbaratando, dos tie breaks mediante, la resistencia de Ricardo Martínez y Pedro Vera (7-6 y 7-6), mismo resultado que escribirían en su partido Miguel Ángel Solbes y Carlos Martí sobre Valentino Acosta y Sergi Nogueras (7-6 y 7-6).
Algo más de amplitud, al menos en lo que a la segunda manga se refiere, consiguieron obtener los hermanos Pedro y Álvaro Meléndez en su batalla particular frente a Thomas Leygue y Ferrán Insa, quienes en el segundo set, tras resistir al máximo, no pudieron mantener la misma cadencia (7-6 y 6-2).
Por su parte, Alonso Rodríguez y Javier Martínez sorprendieron a la dupla formada por Denis Perino y Diego Gil, remontando un partido muy complejo, tirando de galones, fondo físico y, sobre todo, épica, pues ambas parejas se manejaron en los mismos registros de entrega y acierto y fueron detalles muy puntuales los que acabaron decantando la balanza para el lado de los primeros (4-6, 6-4 y 6-4).
Con ciertos problemas para soltarse en el marcador, Javier Valdés y Rafa Méndez solventaron su primer compromiso en suelo madrileño ante Adrián Marqués y Cayetano Rocafort (6-4 y 6-3).
Sí que habría amplitud, por ejemplo, en partidos como el de Facundo Domínguez y Aris Patiniotis ante Javier Bravo y Carlos Pérez, donde se notó la diferencia de ranking (6-1 y 6-1), en el de Miguel Lamperti y José Fernández, muy sólidos ante David Fernández y Juan Restivo (6-2 y 6-1), o en el de Mario Huete y Aitor García Bassas sobre Sergio Alba y Raúl Marcos, aprovechándose de su mayor poderío aéreo (6-3 y 6-2).