Los siempre inciertos cuartos de final esta vez no lo han sido tanto. Las favoritas han dominado prácticamente a placer sus respectivos emparejamientos y salvo la dupla nº2 del ranking, el sufrimiento ha sido mínimo.
De hecho, Martita Ortega y Gemma Triay han sido las únicas que se han visto obligadas a apretar dientes y palas para conseguir la victoria, teniendo que remontar un duelo que se les había puesto cuesta arriba.
Sus grandes rivales, Ari Sánchez y Paula Josemaría, no estuvieron tan finas como en otras ocasiones, y les costó soltar amarras ante Vero Virseda y Claudia Jensen, una pareja que siempre da problemas y que es muy solvente en casi todo tipo de pistas.
El binomio hispanoargentino apenas concedió resquicios en defensa y eso les permitió no solo soltarse en ataque, sino poner en bastantes problemas a una Ari y una Paula acostumbradas a dominar con solvencia. Esta vez no fue así, y en la primera manga apenas tuvieron un break de distancia, mientras que en la segunda sí que fueron capaces de abrir una brecha ligeramente mayor (6-4 y 6-3).
Casi el mismo marcador escribirían Alejandra Salazar y Sofia Araújo. Madrileña y portuguesa precisaron de su mejor cara para imponerse a Virginia Riera y Tamara Icardo, que llegaban con ganas de ponerle picante al torneo y cerca estuvieron de conseguirlo; juntaron filas, jugaron al unísono y solo dos roturas puntuales les impidieron dar el paso definitivo para certificar su hazaña (6-4 y 6-4).
Bea González y Delfi Brea, a quienes les tocó bailar con el juego combinado de las hermanas Mapi y Majo Sánchez Alayeto, consiguieron en su caso salir afiladas, con la pólvora prendida y sacudiendo la pista 2 del torneo. En un alarde de pádel ofensivo, Bea y Delfi apenas encontrarían resistencia en las de Zaragoza, jugando a placer y evitando desgastarse en exceso. Con un paso rápido por su eliminatoria (6-3 y 6-2), la andaluza y la argentina se plantaron en semis con total suficiencia.
Finalmente llegaría la complicación del día, que en esta ocasión la sufrieron Ortega y Triay a manos de Patty Llaguno y Lucía Sainz, demostrando que la pista (algo más lenta de lo habitual en Suecia) les favorecía. Fueron capaces de ponerse por delante en los primeros compases tras aguantar el empujón inicial de las cabezas de serie nº2 y responderles en el tramo final con una rotura.
Así, con el pie cambiado, Martita y Gemma se vieron obligadas a ofrecer una cara bien distinta, a subir las revoluciones y jugar más sueltas, algo que hicieron nada más volver del banquillo, anotándose los dos siguientes parciales con una autoridad no vista hasta el momento, con una puesta en escena colosal que les dio de rédito 12 juegos a favor y solo uno en contra (6-4, 1-6 y 0-6).
Con todo ello, las semifinales de este sábado en Malmö nos dejarán a Ari Sánchez y Paula Josemaría enfrentando a Alejandra Salazar y Sofia Araújo, y a Bea González y Delfi Brea ante Martita Ortega y Gemma Triay.
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