No eran Alejandro Galán y Juan Lebrón los principales favoritos en la final de Menorca, pero supieron aprovechar a la perfección su papel de »invitados» a la fiesta.
El choque insular juntaba una de esas finales que tantas ganas teníamos de haberla visto a lo largo de la temporada pero que las circunstancias no nos habían dejado: las lesiones, las grandes culpables.
Los otrora números 1 contra una pareja que les ha dado una vuelta de tuerca más al pádel ofensivo, explosivo y dinámico que ellos habían »creado», Arturo Coello y Agustín Tapia, quienes precisamente llegaban con alguna que otra espina clavada y con ganas de aprovechar la ausencia por eliminación en semis de Franco Stupaczuk y Martín Di Nenno, era una oportunidad perfecta para aumentar distancias.
El espectáculo, eso sí, lo pusieron solo dos de ellos, el madrileño y el andaluz iluminados por el sol de Menorca, inspirados en la isla; su caminar fue seguro, firme y contundente, creando peligro constantemente y no dejando que la maquinaria de los ‘Golden Boys’ cogiese velocidad. Así, a golpe de corneta, Ale y Juan fueron cimentando sin excesivos problemas una victoria que llegaría con un primer set que fue excelso, una rotura tras otra, con un 3-6.
Buscarían reaccionar Tapia y Coello pero se encontraron con una versión arrolladora y tremendamente resolutiva de Ale y Juan, inconmensurables con un 0-4 de entrada que cortocircuitaba todas las ideas de los nº1, demasiado revolucionados y buscando puntos rápidos pero sin fortuna y en un juego constante de ida y vuelta con talento puro en ambos lados y locura táctica, era Lebrón el que más se divertía y creaba confusión al tiempo que Galán descerrajaba cada bola que llegaba a sus inmediaciones y también a las de su compañero.
Conseguirían recortar uno de los dos breaks (2-4) pero todo fue un mero espejismo porque las distancias se mantuvieron (2-5) y siguieron aumentándose con el juego definitivo (3-6 y 2-6), el que daba el tercer título a Lebrón y Galán desde la vuelta de vacaciones y también el tercero consecutivo en los últimos tres años.
Se suman a la pelea que existe de cara a final de temporada en la que Coello y Tapia por un lado y Di Nenno y Stupa parten como favoritos pero los campeones en Menorca tienen todavía mucho que decir y pueden terminar siendo los jueces de la clasificación.
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