La ronda de octavos de final del cuadro masculino nos dejó, como si de un videojuego se tratara, tres niveles de dificultad en los partidos.
Estaba el fácil, en el que se ubicaron dos encuentros; el medio, con partidos en los que al menos uno de los sets tuvo que definirse en un final ajustado y que activó el »modo cero errores», y por supuesto, el difícil, en el que hubo incluso que remontar para no tener que hacer las maletas antes de lo esperado.
Empezando a hablar del último nivel, el de los choques disputados, contamos primero el partido de Álex Arroyo y Gonzalo Rubio ante Jaime Muñoz y Jairo José Bautista, pareja que salió sin miramientos ni complejos ante la gran sorpresa del día anterior. Fue un partido muy intenso por parte de los cuatro, que se pasaron y repasaron, con Jaime y Jairo siendo los que primero daban el paso adelante (5-7) y recibiendo después la respuesta de Álex y Gonzalo tras llegar al tie break (7-6).
En el tercer y definitivo parcial, Arroyo y Rubio no dieron ya opciones a los jóvenes, les pusieron la barrera y les impidieron sumar un solo juego, saliendo en tromba a la conquista del partido (5-7, 7-6 y 6-0).
Los ‘Súper Pibes’ Franco Stupaczuk y Martín Di Nenno tenía delante a esa pareja que denominamos su versión 2.0, la formada por Leo Augsburger y Tino Libaak, la cual cuenta quizá con más argumentos en ataque pero lógicamente le falta el tiempo de forjado que sí llevan Franco y Martín.
Un »duelo en espejo» en el que Libaak y Augsburger desenterraron el hacha de guerra para morder desde el primer minuto y obligar a los cabezas de serie nº2 a pisar el acelerador nada más comenzar. Así el partido se disfrazó de espectáculo con acciones increíbles a ambos lados de la red, salidas de pista, recuperaciones…todo en pos del disfrute dle público, que vio cómo se llegaba al desempate en el primero y este se iba al bando de Tino y Leo (7-6).
Las alarmas que encendieron pronto se apagaron, pues los de Carlos Pozzoni se recuperaron milagrosamente y en tiempo récord. Pasaron rápidamente a mandar en el partido y a espantar todos los fantasmas de la eliminación con dos sets muy favorables a sus intereses (7-6, 3-6 y 2-6).
En el nivel intermedio encontramos partidos como el que supuso unos nuevos cuartos de final para ‘Sanyo’ Gutiérrez y Agustín Gutiérrez, venciendo estos a Rafa Méndez y Javi Rico (7-6 y 4-6) en un partido muy complejo y que tuvo a los cuatro en un puño en todo momento; también aquí colocamos a Ale Galán y Juan Lebrón, derrotando a la pareja del momento, Clément Geens y Benjamin Tison con un 7-6 muy complicado de inicio y un 6-0 de calma total en la continuación.
En el duelo de parejas llegadas desde las previas, David Gala y Javi Martínez no pudieron con Javi Valdés y José David Sánchez, vencedores merced a un 6-7 y 2-6 mientras que Juan Tello y Álex Ruiz se las vieron y desearon para pasar por encima de Javier García Mora y Javier Glez. Barahona. Los ‘Javieres’ volvieron a mostrar un excelente nivel de acierto y obligaron a que el andaluz y el argentino le pusieran todo su empeño a las acciones y no pudieran relajarse (7-6 y 7-5).
Entre los partidos más cómodos de la sesión tenemos que citar la victoria de Juan Cruz Belluati y Javi Ruiz ante Álvaro Cepero y Álex Chozas, firmada con un 6-3 y 6-4, así como la de Fede Chingotto y Paquito Navarro ante Edu Alonso y Miguel Benítez, en la que los favoritos se impusieron sin complicaciones con un 6-4 y 6-1.
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