La jornada de cuartos de final entre las chicas caminó por la senda de la tranquilidad hasta que dos elementos puntuales, dos acciones que rara vez solemos ver en competición oficial, alteraron el pulso que se estaba viviendo en la Caja Mágica.
Sobre todo conviene destacar una de ellas, la cual supuso que, una vez más, un juez árbitro recibiera sonido de viento por parte de los aficionados.
Tras las pequeñas dudas y contratiempos de los octavos de final, en esta ocasión su partido fue coser y cantar. Ari Sánchez y Paula Josemaría no se anduvieron con contemplaciones y prefirieron evitar sustos y desgaste innecesario, dejando a sus rivales, Mapi y Majo Sánchez Alayeto, secas en lo que a producción se refiere.
Con un amplio margen y un 6-0 y 6-2, despidieron a las gemelas del torneo madrileño poniendo rumbo a las semifinales del sábado.
Gemma Triay y Martita Ortega siguieron un camino parecido, pues se veían contra dos de las sensaciones del curso, Alejandra Alonso y Andrea Ustero, pero en esta ocasión demostraron la diferencia en el ranking y la superioridad de una pareja pensada para ganar títulos ya ante otra en crecimiento e ideada para lograrlos en el futuro. Un 6-2 y 6-3 supuso la clasificación de Triay y Ortega para la siguiente ronda.
Después llegarían los »momentos tontos» del día, dos partidos con dos acciones puntuales que provocaron un final abrupto y poco habitual, uno de ellos incluso los abucheos del público.
Primero citamos el duelo entre Vero Virseda y Claudia Jensen ante Delfi Brea y Bea González que bien es cierto que apenas tuvo argumento, pues la andaluza y su compañera argentina fueron dos ciclones imparables que no encontraron freno en ningún momento, pero que concluyó con una doble falta (algo muy poco habitual en el pádel) de Jensen al servicio, una forma extraña de despedirse de la prueba (6-2 y 6-2).
En el otro, todo se complicaría aún más. Alejandra Salazar y Sofia Araújo peleaban con Virginia Riera y Tamara Icardo, siendo derrotadas por estas últimas en un choque que fue el más aprejo del día, con voleas constantes, peleas interminables y mucha intensidad, tirándose de todo y preocupándose más de atacar que de defender.
Un break daría el primer pasito a Riera e Icardo (4-6) y en el segundo, cuando el partido marchaba 4-5 y 15-40 en favor de la valenciana y su compañera, todo se torció. Araújo golpeaba la verja con su pala y recibía una advertencia del árbitro, la segunda del partido, lo que significaba punto para las oponentes y con ello, el final adelantado (4-6 y 4-6). Silbidos del público y caras de incredulidad en Virginia y Tamara al tiempo que Alejandra sonreía impotente y Sofia se marchaba de la pista con cara de muy pocos amigos y sin la posibilidad de una remontada que nos hubiese dejado un duelo con mucho morbo entre cuatro excompañeras.
Una eliminación sorpresa que deja estas semifinales:
Paula Josemaría y Ari Sánchez vs. Delfi Brea y Bea González
Tamara Icardo y Virginia Riera vs. Gemma Triay y Martita Ortega
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