Esperábamos bastante pelea de cara a las semifinales femeninas dado el nivel que habían demostrado todas las parejas durante el torneo y más teniendo en cuenta los nombres que había en liza, pero a la hora de la verdad, solo dos parejas demostraron un gran poderío sobre la pista.
Además, la sesión nos ofreció una dura venganza, la que las nº1 obtuvieron en su partido tras perder de manera épica el título en el torneo anterior, dejando encima sin posibilidad de pelear por otro a sus rivales.
Asi Sánchez y Paula Josemaría se medían a Bea González y Delfi Brea, final hoy por hoy anticipada, puesto que unas se mantienen en todo lo alto y las otras han crecido de manera exponencial, pero tras lo visto en Madrid, todo quedó en un espejismo.
Mantuvieron el nivel de demolición Ari y Paula pero se bajaron del mismo Bea y Delfi, totalmente desdibujadas en la puesta en escena y sepultadas bajo una losa de breaks en contra. Demasiado minadas en el rendimiento, se convirtieron en meras espectadoras del juego de las nº1, sueltas, convencidas de lo que hacían, sonriendo en todo momento, y logrando un contundente 6-3 y 6-2.
Después llegaría un espectáculo mayor de puntos, el conseguido por Gemma Triay y Martita Ortega en su partido ante Virginia Riera y Tamara Icardo. Las dos parejas fueron en cuartos un martillo de demolición pero parece que a valenciana y la argentina se quedaron en semis con la pólvora mojada, pues no comparecieron a la fabricación de puntos, dejando toda la responsabilidad anotadora a Triay y Ortega (quienes la aceptaron con gusto).
Un 2-6 y 1-6 sin ni siquiera llegar a la hora de juego conformaría la gran final de este domingo, en la que volveremos a ver a Paula Josemaría y Ari Sánchez midiéndose a Gemma Triay y Martita Ortega. ¿Tendremos a las ganadoras habituales o por fin la pareja Triay-Ortega levantará un título?
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