Han vuelto con mucha fuerza Ari Sánchez y Paula Josemaría, carne de final y, una vez en ella, de título. Pocos o prácticamente casi ninguno se han dejado por el camino de baldosas amarillas por el que transitan.
Las reinas del ranking y de la competición han demostrado que, se ponga quien se ponga delante, son casi imparables y si acumulan como en la final de Viena, errores a niveles ínfimos, contestarles en la pista se hace prácticamente imposible.
Tenían como rivales a Delfi Brea y Bea González, caras nuevas que se han sumado a la pelea por los puestos de honor. Lejos aún de su ‘prime’ de juego, la argentina y la andaluza se presentan como nuevas rivales que sumar a Salazar y Triay y aunque en la final estuvieron algo desdibujadas, no duden que harán pie en más de una de aquí a diciembre.
En el Steffl Arena se daban cita las cuatro con un comienzo de medición (3-2) que rápidamente daba paso a un acelerón de las favoritas. Tres juegos seguidos más a base de ser muy disciplinadas con su saque y apretar todo lo que podían desde el resto les permitió elevarse en la central y cerrar, con un claro 6-3, el primer envite.
Lejos de quedarse ahí, demostraron que su crecimiento este año es, entre otras cosas, por inconformismo, por buscar siempre la mejora y querer más y cuando ya tenían el primero, buscaron con ahínco el segundo. Arranque fulgurante desde el banquillo (3-0) que no permitía un respiro a Brea y González ni tampoco que revivieran, quedándose siempre a las puertas de sumar, lejos de sus prestaciones e ímpetu habituales.
Poco habíamos pasado de la hora de juego cuando, en el séptimo juego, llegó el finiquito, la rendición final de la resistencia de Bea y Delfi. No pudieron más con el desgaste al que les estaban sometiendo y claudicaron con un 6-3 y 6-1. Eso sí, pisaban una nueva final (ya van dos seguidas), aunque esta vez no impedían que Ari y Paula se tomaran cumplida venganza levantando su sexto título de la temporada, igualando (aun sin haber llegado al ecuador) el mismo número de títulos que consiguieron entre junio y diciembre de 2022, justo cuando se colocaron como números 1. No tienen freno y quieren más.
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