Hubo mucho fuego cruzado y duelos con varios pistoleros en las semifinales masculinas. También tuvimos enfrentamiento entre excompañeros y despedida de una de las parejas, todo para dejar una final en la que Argentina será protagonista con tres representantes entre los cuatro contendientes.
El primer partido de las eliminatorias enfrentó a veteranos y nóveles a partes iguales. ‘Sanyo’ Gutiérrez y ‘Momo’ González contra Fernando Belasteguín y Miguel Yanguas, además de dos excompañeros, los argentinos.
Un choque de estilos en parte similar, con los dos jóvenes asestando golpes eléctricos, subiendo y bajando, saltando y llegando a bolas imposibles, al tiempo que los veteranos, que se reencontraban aunque frente a frente, le ponían empuje, temple y rebajaban las revoluciones siempre que podían.
Así comenzaron el toma y daca en el que los cuatro conseguían mantener sus saques hasta que, en la parte final, ‘Momo’ y ‘Sanyo’ lograban lo que tanto habían buscado los cuatro, romper el servicio rival, poniendo la única diferencia existente en el marcador: 6-4.
Cambiaría el dominio en la continuación, ahora con Bela y Yanguas ahondando más en la presión, provocando que sus dos rivales tuviesen que pegarse más al cristal (1-3) y no jugasen tan cómodos. La consigna de Willy Lahoz (ex compañero de Bela) desde el banquillo, surtió efecto, y les devolvieron el golpe libra por libra (4-6), citándose en el episodio final.
Ahí, de nuevo, un Bela que estaba de 44 cumpleaños y quería festejarlo con una victoria, apoyaba más si cabe en las tareas ofensivas a un Yanguas que cada vez se crecía más, consiguiendo como recompensa un 1-2 que parecía sería suficiente para meterles poco a poco en la final, pero resurgió el ‘Equipo G’, González y Gutiérrez, y encendiendo nuevamente los motores se fueron sacudiendo el dominio y la presión que les estaban metiendo, sacando a flote la cabeza para terminar con cuatro juegos a su favor que les proporcionaban un final de partido tremendo y la consecución de la victoria (6-4, 4-6 y 6-3).
A continuación aparecerían por el pabellón Maxi Sánchez y Lucas Campagnolo para hacer frente a Franco Stupaczuk y Martín Di Nenno, pero los ‘Super Pibes’ demostraron que el salto en el ranking es muy alto y que están varios escalones por encima.
A pesar de que quizá las condiciones de juego (pista lenta en la que no sale mucho la bola) podría favorecer a un Maxi y a un Lucas de juego algo más de control, lo cierto es que el rey fue Di Nenno, manejando la pelota a su antojo. Eso sí, sin embargo la primera rotura sería a cargo de Sánchez y Campa, en el sexto juego (4-2), lo que no impedía que la respuesta de los dos argentinos fuese contundente: contrabreak e igualada (4-4).
A partir de ese momento, caminaron de la mano en el parcial hasta que, en el último suspiro y empezando a ver el tie break en el horizonte, Martín y Franco dieron otro acelerón al que ya no llegaron sus oponentes. Saque, break y set para ellos (5-7).
El segundo asalto ya no tuvo tanta alternancia, pues los de Carlos Pozzoni cogieron el mando y no lo soltaron. Mucho más acertados y concediendo lo mínimo posible, pusieron rápidamente un 0-2 a su favor que se iría ampliando con el paso de los minutos pasando a un 1-4 y luego a un 1-5 que Campa y Sánchez solo pudieron maquillar ligeramente (5-7 y 2-6).
Final con Argentina como protagonista pero totalmente inédita entre ‘Momo’ González y ‘Sanyo’ Gutiérrez buscando estos su primer triunfo como pareja, ante Franco Stupaczuk y Martín Di Nenno. Se viene partidazo.
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