De nuevo ha habido sorpresa positiva en los octavos de final masculinos en Francia. Una pareja, contra pronóstico, ha sido capaz de meterse en sus primeros octavos de final eliminando a dos de los favoritos, a una dupla que no termina de encarrilar su inicio de temporada.
Primera toma de contacto de manera oficial de los nº1, Maxi Arce y Franco Dal Bianco, con la pista en Francia. Con la ilusión más que intacta y muy motivados tras llegar con el título de Sevilla bajo el brazo, los dos argentinos no dudaban en ningún momento ante Fabricio Baltazar y Santiago Frugoni.
Cierto es que estos ofrecieron una gran imagen y que no les dejaron relajarse en ningún momento, pero terminaron claudicando a pesar de sus continuos intentos por alargar el choque, que concluyó con un 6-3 y 7-5.
Los subcampeones de la capital andaluza, Agustín Torre y Diego Ramos, precisaron de sudar la gota gorda y esforzarse hasta el límite para sortear a José Carlos Gaspar y Diego Gil. Muy bien los dos españoles ante una pareja siempre rocosa y que está acostumbrada a sufrir, pero que esta vez llevó ese mantra hasta el extremo. Sin un respiro, el partido vivió un carrusel constante de puntos y un continuo ir y venir de pelota que terminaría con un marcador muy ajustado (7-6 y 6-4).
Por el otro lado del cuadro, los dos primeros partidos se cerraron con tres sets y también una pelea incesante. Leonardo Yob y Luciano Puppo consiguieron sorprender a los hermanos Miguel y Nuno Deus después de levantar hasta cuatro puntos de partido (llegaron a estar hasta 2-5 abajo) y cerrar el choque creciendo sobremanera en la pista, alcanzando así los primeros cuartos de final de su carrera (6-3, 4-6 y 7-6).
Pablo Lijó y Miguel Semmler continuaron con su meteórico crecimiento en A1 Padel y esta vez dejarían fuera a una de las parejas de la parte alta del ranking, la formada por Andrés Britos y Maxi Sánchez, quienes siguen sin encontrar la tecla de la efectividad. Los españoles empezaron con algunas dudas y algo de falta de efectividad en la defensa, lo que supuso que ganaran la primera manga con solo un break de ventaja y que en la segunda sus rivales continuasen creciendo y exprimiéndose en ataque para sacar rédito: el empate. Fue en el tie break y sobre la bocina, pero valió igual, si bien en el tercero, el madrileño y el gallego manejaron a su antojo la bola y las acciones, con una efectividad sin precedentes en el choque y acabando con un 6-4, 6-7 y 6-1.
Después, ‘Tolito’ Aguirre y ‘Tito’ Allemandi vivirían un partido totalmente plácido, calmado, de pulsaciones muy bajas. Rodrigo López y Tomás Cheda se dejaron en el hotel la capacidad anotador y tanto Allemandi como Aguirre jugarían a placer, controlando en todo momento y apretando justo lo necesario, pues poco les hacía alta para acumular puntos una y otra vez hasta el 2-6 y 3-6 definitivo.
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