Nueva pareja que une dos continentes y que junta a dos jugadores bastante jóvenes. Por un lado el brasileño Lucas Bergamini, del 97, y por el otro el pamplonés Íñigo Zaratiegui, del 95.
Un drive que gusta de tocar mucha bola, manejar el juego y mover a los rivales, uno de los de la antigua escuela, gran defensor y armador del juego, y por el otro un revés de potencia, mucha movilidad en pista y asentado ya en el cuadro final, en el que quiere dar todavía un paso más, pues esta temporada lo más lejos que ha llegado ha sido a cuartos en el Madrid Open y en el Challenger de Albacete, resumiendo todo lo demás en eliminaciones en dieciseisavos y en seis octavos de final entre WPT y Challenger.
En el caso de Íñigo, esta pasada temporada la compartió con cuatro jugadores distintos: primero con Tonet Sans, luego con Javier Martínez y después con Javier Glez. Barahona en alguna prueba del calendario FIP para terminar el año con Jon Sanz en el Master Absoluto de la Federación Navarra.
Por su parte, Lucas Bergamini, quien arrancaba la temporada junto a Lucas Campagnolo, pasaría después por los torneos junto a Jorge Ruiz y Álex Arroyo, pero con demasiados altibajos y sin terminar de ofrecer su mejor versión.
Ahora buscará un nuevo reto junto al español, que quiere dar un salto de calidad junto al control y al rigor táctico de Bergamini. Mucha suerte a esta nueva pareja.
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