De nada les valió esta vez a Juan Tello y Fede Chingotto el intentar tirar de hemeroteca y resucitar la gloria pasada de Portugal, donde alcanzaron su primera final. Esta vez, al igual que entonces, el destino les fue esquivo y se quedaron con las manos vacías, volviéndose a casa sin premio, siendo Ale Galán y Juan Lebrón los que sí pusieron la guinda al torneo.
Duelo España vs. Argentina en la cumbre, unos contra la historia y otros en pos de volver a reinar en el campeonato, pero los cuatro jóvenes y con un pádel muy vistoso que pudieron disfrutar los aficionados que aguantaron el sol y el calor portugués.
Un partido muy costoso a nivel físico, pues de tanto conocerse, se buscaban las cosquillas constantemente y ello redundó en un juego muy ofensivo, de globos milimetrados, de voleas con mucho peso y de intercambios directos en los que nadie se guardaba nada. En todo eso empezaron mejor Tello y Chingotto, imponiendo su servicio y controlando mejor las acometidas aéreas de un Lebrón muy desacertado en el remate y un Galán que lo intentaba pero no rascaba premio alguno (2-5).
Esa diferencia les sirvió para poder cerrar en el siguiente saque el set y ponerse por delante (3-6) a la espera de una reacción que no tardó en llegar. Salieron en tromba animados por la grada y por las consignas de su entrenador Juan y Ale y dominaron en el inicio de esta segunda entrega con un 3-1 que les ponía en órbita; fueron manejando esa diferencia, apagando los focos de rebeldía que llegaban de los argentinos y forzando, finalmente, el tercer set tras conquistar la igualada (7-5) en un final apretado.
El inicio de la última entrega no pudo tener más emoción, pues ninguna pareja era capaz de conservar su saque, pasándose la ventaja de unos a otros, como con miedo de tomar la iniciativa. En la segunda intentona, esta vez sí, el andaluz y el madrileño pudieron contener el empuje rival y asegurar el servicio, cogiendo ventaja y marchándose directos a por la consecución del set, ya sin oposición. Al final, 4-6, 7-5 y 6-3 favorable a los españoles en su cuarto entorchado de esta campaña.
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