Un torneo más, una final más (ya van siete) y un título más (cuatro en total). Parece que el volver a casa tarde un domingo y con un trofeo bajo el brazo se está convirtiendo en algo muy habitual para Ariana Sánchez y Paula Josemaría. Este año están siendo muy protagonistas y en Cascais también han dejado su impronta.
Ante unas renovadas y reconvertidas Marta Marrero y Martita Ortega, que volvían a estar en una de esas estancias que antes les eran tan habituales pero que ahora se han vuelto ocasionales, la final, sacaban a relucir un trabajo magnífico pegadas al cristal para salir después a la superficie de la red, desde donde percutir una y otra vez.
Buscaban Marrero y Ortega su primer título del año, estrenar un palmarés necesitado de ello como el comer, pero se dieron de bruces con la realidad, que quería otra cosa, un comienzo arrollador de Paula y Ari, directas del 0-0 al 0-3 pero que, poco después permutaba y devolvía la igualdad, pues reaccionaban las chicas de Carlos Pozzoni y lograban resurgir hasta igualar la contienda.
Sin embargo, a partir de ese sexto juego el mando del partido volvió a las manos de Josemaría y Sánchez, quienes se anotaron otros tres juegos seguidos para cerrar con su saque pasados los 45 minutos de juego (3-6).
Misma racha en el segundo. La catalana y la extremeña volvían a ponerse por delante con su saque y después lograban un break que esta vez era contestado justo después para poner otra vez el 2-2.
Desde ahí, igualdad total hasta los últimos compases del partido donde las de Gustavo Pratto conseguían otro break para cerrar con un 3-6 y 4-6 la final. Título, liderato de la Race, sonrisas y aplauso enorme del público, muy merecido para las cuatro.
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