Era el momento de la verdad, el del debut para todas las cabezas de serie y eso, ante rivales que vienen con más rodaje que tú, siempre es complicado. Sueñen verse en octavos unas cuantas sorpresas por este motivo pero no así en esta ocasión. Las principales favoritas al título pusieron la barricada (algunas con más solvencia que otras) e impidieron la rebelión.
Se vistieron de corto y saltaron a la pista con ganas de demostrar su condición, y varias de ellas dominaron con suma autoridad, como Marta Talaván y Lorena Rufo, quienes con un doble 6-3 dejaron fuera a las portuguesas Margarida Fernandes y Patrícia Maria Ribeiro, o como Jessica Castelló y Alix Collombon, que endosaron un 6-0 y 6-0 a Marta Pérez y Aitana Pérez Encinas.
También estuvieron muy solventes en ataque y expeditivas en defensa Mari Carmen Villalba y Carla Mesa, pareja formada para la ocasión y que con un 6-3 y 6-2 despedía a Cristina Carrascosa y Manuela Schuck, procedentes de previa; por su parte, Vero Virseda y Lucía Marínez hacían lo propio con dos italianas que han exprimido todo lo que han podido su lucky loser, Carolina Petrelli y Alessia La Monaca (6-1 y 6-2), idéntico resultado al cosechado por la pareja portuguesa de Ana Catarina Nogueira y Sofia Araújo sobre otras italianas, Chiara Pappacena y Giorgia Marchetti.
En cuanto a la parte complicada, el día ajetreado fue para Esther Carnicero y Cecilia Reiter, tocando a remontada sobre Alicia Blanco y Raquel Piltcher (3-6, 6-4 y 6-2), algo que consiguieron con un gran final de partido donde el acierto siempre fue suyo; Cata Tenorio y Julieta Bidahorria tuvieron complicaciones únicamente en el primer set sobre Rebeca López y Marta Arellano, pues necesitaron recurrir al tie break para llevárselo, mientras que en el segundo ya impusieron su mayor ranking sin tantos problemas (7-6 y 6-2).
Carmen Goenaga y Beatriz Caldera, dos jóvenes que están ilusionando cada vez más, precisaron de remontar sobre Ángela Caro y Arantxa Soriano, una de esas duplas de la parte media-baja que siempre te complica y que se agarra a los partidos; de hecho, su inicio fue bastante mejor y pelearon sin descanso hasta que les aguantó el físico, no pudiendo hacer ya nada en el tercero (3-6, 6-4 y 6-1).
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