ENORME Agustín Tapia, y ENORME también Pablo Lima. En su mejor partido como pareja desde que se juntaron, el argentino y el brasileño se encargaban de levantar al público de Las Rozas y de impedir que Ale Galán y Juan Lebrón llegasen a una nueva final.
Sorprendiendo a los números 1 con un juego muy trabajado, cerrando bien el medio y jugando prácticamente con la rodilla en tierra para defender, muy juntos, bien plantados y evitando en todo momento que la bola levantara en exceso para que los españoles la apretaran como suelen.
Esa táctica les permitió dominar el partido sin las complicaciones que se suelen tener ante los números 1 y les dio la iniciativa desde el principio, poniendo un break de ventaja en el marcador (1-3) que se vio favorecido también por los garrotazos que Lima ponía en suspensión hacia atrás y los remates en salto que conseguía encauzar Tapia cuando la bola venía algo más corta de lo deseado. Así, sin bajar el ritmo y defendiendo a la perfección Agus y Pablo cerraban la primera manga con un 6-4.
Mantenían ese nivel en la segunda, iniciando de nuevo con rotura a su favor y poniendo ya en muchos más apuros a los de Mariano Amat. No encontraban la fórmula para romper su defensa y por más que lo intentaban con destellos de Lebrón y con la actitud de Galán, todo era imposible. Con otro 6-4, Pablo Lima y Agustín Tapia se colaban el gran final en el día del cumpleaños de Tapia. Mejor regalo, imposible.
En el otro choque hubo bastante más miga en cuanto a pelea. Cuatro argentinos se veían frente a frente. Por un lado Maxi Sánchez y ‘Lucho’ Capra, una pareja que tras no entrar en ninguna quiniela se ha encargado por méritos propios de situarse como candidata en cualquier torneo, y por el otro, Fernando Belasteguín y ‘Sanyo’ Gutiérrez, dos que han hecho de la adaptación y la constancia su modus operandi.
Partido de revancha para los segundos tras caer derrotados en Valladolid, pero las hostilidades las iniciaron mejor Maxi y ‘Lucho’, muy serios y confiados con un 2-0 de entrada merced a un break que no sentó nada bien a Bela, más enojado aún con el segundo (4-1) e intentando poner todo de su parte para disminuir la renta. Lo consiguió casi en su totalidad pero al final el luminoso se fue para el lado de sus oponentes con un 6-4.
El comienzo del primer envite se repitió en el segundo pero no terminaría de llegar la sangre al río, pues contestaron rápidamente ‘Sanyo’ y Bela, parando el chaparrón y poniendo el 2-2. En ese momento ‘El Rey Bela’ se hizo más grande si cabe y con un Sanyo que cada vez movía la bola con más claridad y que aparecía también con sus remates paralelos lograron ir al tie break, donde vencieron y alargaron el partido.
Quedaba un tercer y definitivo set que se mostró también muy igualado. Poco margen para el error, poca distancia entre las parejas y mucha seguridad en los cuatro; nadie quería fallar y conceder ventaja hasta que llegó el octavo juego que muchas veces es decisivo, y esta vez fue una de ellas. Los de Claudio Gilardoni, los hombres de negro, lograron el break que tanto habían buscado y se pusieron con un 5-3 que casi pierden después con su saque (levantaron hasta tres bolas de break) pero, con un cierre magistral, pusieron el último punto en su casillero (6-4, 6-7 y 4-6). Otra maratón cerrada con medalla de oro para ellos, veremos cómo llegan de físico al último partido.
No antes de las 12, la gran final, con Pablo Lima y Agustín Tapia ante Fernando Belasteguín (precisamente dos ex compañeros suyos) y ‘Sanyo’ Gutiérrez.
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