Dos parejas que han llegado a la final dominando todo el torneo, cediendo solo una de ellas un set, y dando muestra de lo bien que se han conjuntado. Una además, en tiempo récord.
Nos va a dejar el Marbella Challenger un duelo de altura entre las cuatro mejores, las dos principales cabezas de serie que llegan enchufadísimas y con la directa metida por lo que pueden saltar chispas.
Las primeras en clasificarse fueron Aranza Osoro y Victoria Iglesias de nuevo, con mucha potencia y resolución, ante Marta Talaván y Lorena Rufo. No les dieron opción alguna pues salieron a comerse la pista, aprovechando el calor para tirar bolas potentes y demoledoras a la defensa de Talaván y Rufo, incapaces de hilvanar su juego, de subir a la red y de buscar opciones para contraatacar. En un abrir y cerrar de ojos habían finiquitado el primer set y se iban al banquillo para mentalizarse de cara al segundo (6-2).
Un segundo set que se inició con lago más de igualdad pero que terminó por inclinarse en favor de las »Vikingas», mejores en la resolución de los puntos, en el espadeo de voleas y en contundencia, pues si por algo se han caracterizado en este torneo y en la buena temporada que vienen haciendo es por eso, por n dejar huecos y aprovechar las oportunidades que tienen. Y así, con un break esencial, terminaron por vencer en el partido y llevarse la eliminatoria (6-2 y 6-4).
La segunda daba la razón a los que confiaban en que la adaptación de Carolina Navarro y Eli Amatriain iba a ser rápida. Se conocen de haberse enfrentado en muchas ocasiones, de haber jugado juntas con España y, por sus respectivas formas de ser, han encajado sus estilos de juego para lograr la mayor efectividad posible. Toque contra trabajo, bandeja contra globo.
A lo largo de los partidos se han ido encontrando cada vez mejor y en estos entrenamientos intensivos que están viviendo antes de su puesta de largo oficial en el Open de Las Rozas, les está sirviendo para pulir defectos y asentarse, habiendo cedido solo un set en su duelo de cuartos, para sacar después toda su experiencia y remontar.
Ahora en semis han vencido a dos jóvenes que venían haciendo un torneo fabuloso, Carmen Goenaga y Beatriz Caldera y que tienen un futuro brillante por delante. Una lástima que, quizá el cansancio, haya podido con ellas, porque entregaron rápido el partido con un 2-6 y 1-6, resultado demasiado abultado para lo que venían ofreciendo pero que ponía de manifiesto que Carol y Ceci han encontrado la clave para rendir juntas en apenas tres partidos. Veremos en la final.
A partir de las 10 de la mañana, final por todo lo alto. Las cabezas de serie número 1 contra las 2, Aranza Osoro y Victoria Iglesias vs. Carolina Navarro y Eli Amatriain en un enfrentamiento inédito. Partidazo.
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