Un día para ver los resúmenes de los partidos, pues hubo muchísima igualdad y en concreto, en dos partidos, el tiempo de juego se fue mucho más allá de las dos horas y media, dejándonos tres sets de infarto y de estrategia pura. Los octavos del Valencia Open han dejado el pabellón bien alto.
Álex Ruiz y Franco Stupaczuk se encargaron de despedir a otro de los locales que quedaba en el torneo, Javi Rico, acompañado este de ‘Momo’ González. Un partido durísimo, de casi tres horas en las que el marcador lo dice todo (6-7, 7-5 y 7-5).
El desgaste fue tremendo, con un derroche incontestable de los cuatro para no reprocharse nada, ni los vencedores ni los vencidos, jugando los cuatro a muy buen nivel.
Empezaron mejor Stupa y Ruiz, con un parcial de 3-1 que en cualquier otra ocasión hubiese sido definitivo, pero apoyados por la grada, Rico y González apretaron dientes y se vinieron arriba para recuperar la desventaja con roturas y contraroturas contantes hasta que se llegó al tie break, donde el menor de los Rico se echaba al público a la espalda con varios puntos seguidos y la consecución del primer set.
Más breaks y contrabreaks en el segundo envite, mismo guion y misma locura de partido. Los respectivos técnicos trataban de ponerle cordura y sosiego al partido, pero se había desmelenado por completo, no siendo hasta el décimo juego cuando se rompería la dinámica y Álex y Franco pudieron salvaguardar su servicio y con ello, hacer dos juegos seguidos para el 5-7 que ponía todo como al principio.
Y en el tercero, los mismos ingredientes al caldero y mismo devenir hasta el décimo juego, cuando de nuevo Stupa y Álex volvieron a romper la inercia de constantes roturas de servicio para hacerse con el suyo y apretar desde el resto a los rivales, logrando otra vez culminar su intensidad, esta vez además con el pase a la siguiente ronda (6-7, 7-5 y 7-5).
Y si ese partido había resultado emocionante, no lo fue menos el de Fede Chingotto y Juan Tello ante Juan Martín Díaz y Pablo Lijó. Los dos primeros llegaban con la moral alta tras su final en Valladolid y con una imagen en el juego totalmente renovada, explotando mucho mejor sus virtudes y volviendo a la imagen que dejaban no hace tanto y que les llevó a ser pareja revelación.
Pero enfrente tenían a todo un clásico como JMD y al físico de Lijó, que han conectado desde el inicio y que les dieron mucha guerra desde el primer minuto, con un toma y daca constante que solo se decidió en favor de una pareja (los dos argentinos) en el tie break. Este primer set iba a ser el anuncio de lo que vendría después, pues el segundo caminó por la misma senda en su inicio hasta que Juan Martín y su compañero gallego pegasen el golpe e impidiesen cerrar el partido por la vía rápida a los de Gaby Reca.
Cerca del tie break, un arreón final del 14 años nº1 del mundo y de Pablo fue el detonante que provocó un break que les dio la igualdad en el marcador con un 4-6 que dejaba un final muy abierto. El tercero se iniciaba con un 2-0 en favor de Lijó y Díaz, pero Tello y Chingotto supieron reaccionar a tiempo e igualar la contienda (2-2); desde ese momento, igualdad máxima y tie break, como reclamaba el público, para decidir a los ganadores. En la muerte súbita el dominio fue de Fede y Juan, quienes pusieron la barrera y no permitieron que los puntos cayesen del lado rival con la misma facilidad que sumaban los suyos para un 7-6, 4-6 y 7-6 sublime, una oda al pádel.
Victoria sin oposición y con su habitual dominio y claridad a la hora de fabricar puntos y cerrar partidos. Así se impusieron Ale Galán y Juan Lebrón a Antonio ‘Pincho’ Fernández y José Antonio Gª Diestro por 6-4 y 6-0, mientras que Fernando Belasteguín y ‘Sanyo’ Gutiérrez, los otros grandes favoritos, fueron los segundos que navegaron con tranquilidad, gracias a un 3-6 y 4-6 sobre Lucas Campagnolo y Lucas Bergamini.
A partir de ahí, todo pelea sin cuartel. Jesús Moya y Edu Alonso se llevaron el duelo de »previas» trasladado a octavos de final al derrotar a Miguel Semmler y Javi Leal en un ajustadísimo 6-7 y 5-7. Se conocen a la perfección y eso se plasmó en que todos buscaban cómo hacer daño al rival constantemente y se olvidaron de defender, buscando únicamente atacar y presionar desde la red.
Pablo Lima y Agustín Tapia tuvieron que esforzarse y no descuidarse lo más mínimo ante José David Sánchez y Javier Valdés, otros que a pesar de llevar unos cuantos partidos en las piernas, supieron sacar carácter y hacer su juego fluido para estar siempre a rebufo y poder dar el susto en cualquier momento. Sin embargo, al final la pegada de Lima y la electricidad de Tapia se impusieron (7-5 y 6-3). Resultado muy parecido obtuvieron Paquito Navarro y Martín Di Nenno para dejar fuera a uno de los locales, José Rico, acompañado de Ramiro Moyano; lo pelearon con insistencia en el primero también apoyados por el público, pero no fue suficiente ese 3 contra 2 y finalmente el ranking dictaminó sentencia, dando el pase a la siguiente ronda a Navarro y Di Nenno (7-5 y 6-1).
Maxi Sánchez y ‘Lucho’ Capra terminaron con el sueño del debut de Álvaro Cepero y Álex Arroyo quienes, a pesar de decir adiós, pueden volverse a Madrid con una sonrisa y satisfechos del resultado obtenido. Primer torneo juntos y primeros octavos de final dando siempre la cara ante los rivales (6-3 y 7-5).
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