Hemos tenido un poco de todo en Marbella. El inicio del cuadro final ha sido una especie de menú degustación en la que ha habido platos para todos los gustos. Unos partidos dominados sin problemas, otros en los que ha habido que sufrir más, incluso remontar y donde también ha habido sorpresas. Y es que ya se sabe que en la variedad está el gusto.
Empezando primero por los más tranquilos y que discurrieron sin mucha complicación, hay que citar la victoria de Álex Ruiz y Franco Stupaczuk ante Javier Valdés y José David Sánchez, quienes no terminaron de aprovechar el llegar más rodados que sus rivales y se perdieron en el entramado ofensivo del dueto hispanoargentino. Mucha pegada y contundencia para vencer por 6-1 y 6-4.
Fede Chingotto y Juan Tello hicieron lo propio, más ampliamente si cabe, ante un Sergio Alba y un Francisco Gil a los que no se les vio cómodos y resolutivos como en otras ocasiones y eso, unido a la enorme pegada de Tello, les dejó fuera de manera express (6-3 y 6-0). Victoria sin paliativos de Javi Rico y ‘Momo’ González ante ‘Coki’ Nieto y un desdibujado Juan Martín Díaz al que no se vio nada cómodo en pista descubierta y sin pólvora en la pegada; la pareja española supo aprovecharse mejor de las condiciones y en un ejercicio muy serio de pádel, logró su clasificación para octavos por 6-2 y 6-4.
El factor sorpresa se lo anotaron ‘Pincho’ Fernández y José Antonio García Diestro ante Iván Ramírez y Miguel Yanguas, la joven pareja que no termina de arrancar este año y dar el estirón que se les presupone.
Muy igualados los cuatro en el ranking (son las parejas 19 y la 20), también lo estuvieron en la pista, donde únicamente los detalles en la parte final de cada set permitieron que ‘Pincho’ y Diestro se impusieran, con dos breaks de diferencia a su favor y mayor contundencia para cerrar el marcador (6-3 y 6-3).
Y ahora tocan los partidos duros de verdad, los que hicieron sufrir a los jugadores. El primero fue la maratón bajo el sol que fraguaron ‘Tito’ Allemandi y Pablo Lijó ante Uri Botello y Javi Ruiz. Con dos parejas necesitadas de victorias balsámicas, el partido fue un choque de titanes disfrutado por el público de la central. Los cuatro mantuvieron sus saques en el inicio hasta que Allemandi y Lijó se adelantaban con un break a su favor y eso les permitía ponerse al mando para cerrar el primer envite a su favor (6-4).
Reacción del melillense y el granadino para arrancar el motor a todas las revoluciones posibles y comenzar un ejercicio de breaks y contrabreaks que llevaría al partido a la locura total. Del 0-3 con que se presentaron en el segundo se pasó al 3-3 y de ahí al 4-5 para Uri y Javi y 0-40 a su favor para cerrar el set; sin embargo, lograrían remontar esa complicada situación el argentino y el gallego para poner el 5-5 y después, de nuevo, pasar la iniciativa al lado de los españoles en los dos juegos siguientes.
Nos íbamos a ir a un tercero totalmente loco en el que de la igualdad se pasó a una ligera ventaja para Allemandi y Lijó (5-4) y saque para cerrar el partido, pero ahora serían Botello y Ruiz los que recuperasen lo perdido y forzasen el tie break final para echarle más leña al fuego. En el desempate, Javi y Uri conseguirían el ansiado triunfo y dejarían sin premio a sus rivales (6-4, 5-7 y 6-7).
Victoria de kilates para Tonet Sans e Íñigo Zaratiegui ante dos rivales a los que conocen muy bien de rondas previas, Jesús Moya y Edu Alonso. Un partido que también fue largo y peleado y que terminaron conquistando Tonet e Íñigo por 6-3, 4-6 y 6-3, con un set para cada uno y un tercero en el que el intercambio de golpes fue constante y que supuso un continuo gotear de roturas de servicio para uno y otro lado hasta que impusieron su mayor ranking y experiencia. También sufrieron Álvaro Cepero y Aday Santana para eliminar a Juani Mieres (ex compañero de Cepero hasta hace unos días) y Martín Sánchez Piñeiro. Tres sets con iguales registros en los que Mieres y la pegada de Piñeiro dieron el primer golpe al marcador aunque, eso sí, con solo un break de diferencia.
En el segundo se cambiarían las tornas gracias a que Cepero comenzó a mandar más desde la derecha y Aday subió las prestaciones en la consecución de puntos. Ya en el tercero, la igualdad de nuevo fue la clave hasta que, con 5-4 a favor de Cepero y Santana, rompiesen el saque de Mieres y Piñeiro y certificasen su presencia en 1/8 con un 6-4, 4-6 y 4-6.
No podíamos irnos sin contar otra batalla encarnizada en la que Agustín Tapia y Pablo Lima sudaron sangre para dejar fuera a Christian Fuster y Jon Sanz.
Los cabezas de serie número 2 tenían claro en el guion que con su pegada y poder ofensivo iban a tener el partido de cara, pero no contaban con la resistencia numantina y el descaro de dos jugadores que se lo pusieron muy, muy cuesta arriba.
Con un break en el tercer juego, Lima y Tapia tomaban el mando en el marcador, manejando entonces la distancia con firmeza y sin complicaciones hasta que lograban cerrar la primera manga a su favor (4-6). Con esa inercia (y con un break a favor) comenzaban el segundo capítulo sin que nada hiciese presagiar lo que estaba por llegar. Siguieron mandando hasta el 5-4 y saque para cerrar el choque pero Fuster y Sanz decidieron subir los decibelios del partido y animarse a la fiesta de sumar puntos igualando el partido, forzando el tie break y llevándoselo para poner todo como al principio.
En el tercero eran ahora los españoles los que golpeaban primero, si bien la diferencia les duró un suspiro, pues Lima tiró de veteranía para arrimar más todavía el hombro en defensa y recuperar la desventaja. Junto a Tapia, apretaron dientes y subieron más la intensidad para ser ahora ellos los que mandasen en el choque y pudieran, al final y con sobresaltos varios, hacerse con la victoria tras más de dos horas de partido (4-6, 7-6 y 4-6).
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