Ya pueden decir que son las grandes triunfadoras de este torneo. Virginia Riera y Sofia Araújo, una pareja que desde hace un tiempo viene en constante crecimiento, ha dado por fin ese pasito que tanto anunciaron y que tardó en llegar. Han presentado su candidatura, han demostrado que pueden amargar el día a cualquier dupla y, sobre todo, que su juego puede hacerlas, al menos, semifinalistas.
Dirigidas con la precisión de un cirujano por el estilista Gaby Reca desde el banco, la lusa y la argentina, talento, pegada y clase, arruinaban el posible doblete a Alejandra Salazar y Ariana Sánchez, totalmente desdibujadas en el partido, muy al contrario que hace apenas 10 días, cuando exhibieron una suficiencia total. Pero este viernes no.
Desde el principio, ambas duplas se midieron y tuvieron una gran paridad, intercambiándose golpes como en cualquier ring de boxeo, intentando salir vencedoras a los golpes. El ranking esta vez no fue determinante pues ni Ale ni Ari lograban encontrar la vía para penetrar en la férrea defensa de Virginia y Sofia y marcharse así en el marcador. Tan iguales estuvieron que necesitaron que hasta la parte final no se decidió a las ganadoras; ahí sorprendieron la lusa y la argentina con mucha garra en intensidad y lograron hacerse con el primer parcial (5-7).
En el segundo, la reacción de la madrileña y la catalana no se hizo de rogar, pero no hubo encogimiento al otro lado de la red. Riera controlaba y Araújo definía, haciendo cada vez más grandes y sólidas, impidiendo que Ale con sus bandejas hiciera daño y que Ari, demasiado intermitente e incómoda con el saque, pudiera sacar a relucir su gran clase. Así, Virginia y Sofia consiguieron romper el servicio y más tarde consolidar su saque para ya no perder la ventaja y cerrar, con un resultado de 5-7 y 3-6, sus primeras semis, en medio de la alegría total y dos enormes sonrisas.
Ejercicio de aguante de Martita Ortega y Bea González
Sufrieron Bea González y su compañera Martita Ortega en un duelo que ya sobre el papel anunciaba pelea. Delante tenían a Mapi y Majo Sánchez Alayeto, rivales siempre complicadas y que te desgastan a tiros desde el minuto 1. Querían las gemelas la victoria a toda costa y pelear por la antesala de la final además de por ajustar el ranking en la parte alta, pero fueron Martita y Bea las que arrancaron con mayor intensidad y acierto, haciéndose con el control y con el marcador.
Muy cómodas en la pista, las dos jóvenes apretaban cuando debían, jugaban con soltura y abrían ángulos en la defensa siempre implacable de las Alayeto, obligándolas a vivir más pegadas al cristal que a la red, su territorio por excelencia. Así, encontraron la manera de ponerse por delante y llevarse el primer envite con dos breaks de diferencia.
Pero ni Mapi ni Majo se rinden y su reacción fue de grandes campeonas, empezando con un break en su primer intento desde el resto, abriendo brecha en el siguiente y cerrando, con idéntico resultado al primero, el segundo parcial, poniendo las tablas de nuevo en el luminoso (6-3).
Empezaron esta vez rompiendo Martita y Bea y poniendo una quinta velocidad ya inasumible para las ex números 1. Muy seguras al servicio, defendiendo como titanes y moviendo de lado a lado a Mapi y Majo, Ortega y González crecieron y crecieron para terminar cerrando el partido en el séptimo juego por un global de 3-6, 6-3 y 1-6 y acceder a las semifinales.
Llegaban sobre aviso Marta Marrero y Paula Josemaría a su duelo contra Mari Carmen Villalba y Verónica Virseda (habían perdido Ale y Ari y sus oponentes también podían dar la sorpresa), por lo que salieron con varios puntos de intensidad metidos ya en sus cuerpos, para no dejarse acometer en exceso por dos jugadoras que aunque las lleves al tran tran pueden dejarte con cara de tonto y ponerse por delante cuando menos te lo esperas.
Así, las de Juan Alday, con la pólvora bien cargada, anunciaron un 3-0 de inicio para ya navegar con viento a favor en esta primera manga y no tener que pelear ni desgastarse más de lo necesario, adjudicándosela por un amplio 6-2.
Virseda y Villalba reaccionaron a la vuelta del banco y lograron mantener el choque igualado hasta el noveno juego, cuando tuvieron hasta tres bolas de break para ponerse por delante, pero no aprovecharon ninguna de ellas y eso, ante una dupla como Marrero y Josemaría, se paga caro.
Break para la canaria y la extremeña y a aguantar desde el resto para poner el 6-2 y 7-5 y acceder a semifinales.
Eli Amatriain y Patty Llaguno tuvieron otra de sus particulares maratones. Un duelo eterno, de esos que te hacen llegar hasta la reserva del depósito de gasolina, en esta ocasión ante Lucía Sainz y Gemma Triay.
Y es que ya se sabe que los partidos contra las »hormiguitas» nunca son fáciles…ni cortos, sino que se alargan en el tiempo, tienen varias temporadas y siempre aparece un actor nuevo en el papel de remontada, pues por mucho que vayan por debajo, no le pierden la cara al choque y siempre se agarran de nuevo al marcador. Y así hicieron una y otra vez ante Lucía y Gemma.
Igualdad total en el comienzo hasta el sexto juego, cuando la menorquina y la catalana pudieron desnivelar algo más la balanza y conseguir dos breaks de diferencia que les servirían para cerrar un primer set con muy pocos errores en las cuatro (6-3).
La segunda manga tuvo a las de Neki Berwig como protagonistas en el inicio gracias a un 2-0 de entrada que sentaría las bases de la futura igualada, pues ni Gemma ni Lucía pudieron responder a esa subida de nivel por mucho que defendieron y vieron cómo Eli y Patty ponían un 6-3 en el marcador que alargaba todavía más la eliminatoria.
Y en el tercero, ataque total en tromba de las cuatro que únicamente terminó por decantar el choque gracias a ligeros detalles. Iba el choque parejo en el sexto juego (3-2), cuando la mangueña y la riojana dieron otro pasito adelante ganando el punto y abriendo ligera ventaja (4-2) que se amplió todavía más en el siguiente (5-2), convirtiéndose ya en totalmente insalvable…en teoría, porque Lucía y Gema apretaron dientes y manos, descerrajando cada golpe para achicar distancias hasta el 5-4.
Muchos nervios y miedo a fallar que en Eli y Patty se convirtieron en una apuesta segura a su juego de globos y defensa para cerrar su saque y colocar el 6-3, 3-6 y 6-4 en el marcador. Semis para Eli y Patty, las segundas consecutivas, afianzándose a la espera de otro zarpazo mañana sábado.
Las semifinales femeninas quedan de la siguiente manera:
Virginia Riera – Sofia Araújo vs. Martita Ortega – Bea González (10 horas)
Eli Amatriain – Patty Llaguno vs. Paula Josemaría – Marta Marrero (16 horas)
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