De los cuatro partidos de cuartos de final nos quedamos en tres tras la anunciada retirada de Fernando Belasteguín (por lesión) y su compañero Pablo Lima. Sin embargo, ninguno de los otros tres choques defraudó e incluso tuvimos una grata e inesperada sorpresa.
Y esa no fue otra que la victoria de Uri Botello y Javi Ruiz, los ‘kombatientes’, contra pronóstico pero con un merecimiento más que total, ante Paquito Navarro y Juan Martín Díaz. El andaluz y el melillense salieron muy convencidos a la pista, sabían que no eran los favoritos, pero les dio igual, desplegaron un juego muy eficaz, sentando las bases con un saque de ambos demoledor que ganaban una y otra vez y que les permitía luego apretar desde el resto y conseguir break tras break.
Tanto la primera manga como la segunda fueron igualadas (7-5 y 6-4), pero siempre dieron Uri y Javi la sensación de estar un pasito por encima, tanto en intensidad (a Paquito no se le vio con la garra ni los arrebatos de otras ocasiones) como en estrategia (una y otra vez buscaban los puntos débiles a la espalda de Juan Martín con globos muy medidos), en carácter y, por supuesto, en acierto.
Un triunfo que les mete por primera vez en unas semifinales en lo que al circuito WPT se refiere y que tiene como único punto »negativo» el hecho de que Uri Botello tendrá que aplazar la luna de miel que tenía prevista comenzar este sábado, así que no sabemos si su ya mujer estará contenta del todo.
Después, Matías Díaz y Ale Galán se veían las caras con dos competidores natos, Miguel Lamperti y Juani Mieres, otros que tampoco terminaron de sacar ese espíritu que les hace siempre pelear un poco más, agarrarse a la pista aunque vayan por debajo y resurgir cuando menos lo esperas. Cierto es que Lamperti y Mieres, a pesar de empezar con la desventaja de un break en contra, consiguieron recuperar parte del terreno y agarrarse hasta el 4-4 pero entonces Díaz y Galán emplearon los contragolpes como armas de ataque y desarbolaron la resurrección bahiense.
La segunda manga empezó con iguales sensaciones pero esta vez no pudieron igualar a base de apretar los dientes y vieron como el pequeño ‘Warrior’ y el gigante volador de Madrid se plantaban con los dos pies, firmes, en semifinales (6-4 y 6-2).
Por último, aparecían en escena dos magos frente a frente, Sanyo Gutiérrez y Cristian Gutiérrez, acompañados cada uno de su paladín defensor, por un lado el ‘Tiburón’ Maxi Sánchez y por el otro aerolíneas Franco Stupaczuk. Duelo de altura, pegada y recursos con el que el respetable se frotaba las manos, y hacía bien.
Y es que los dos jugadores de derecha repartieron técnica y calidad a raudales, con dejadas, cambios de dirección, golpeos con efecto…al tiempo que sus parejas, volaban, jugaban por abajo y bandejeaban apretando a los contrarios al fondo de la pista con el simple objetivo de ganar terreno, aunque fuese centímetro a centímetro.
Hay que decir que aunque el marcador final reflejó un 6-1 y 6-4, fue demasiado engañoso, pues ni unos dieron sensación de dominar el partido ni los otros de verse dominados, si bien es cierto que Stupa y Cristian entraron bastante más erráticos, especialmente el chaqueño, quien se topaba una y otra vez con la red o el cristal y no tenía (ni quisiera por arriba) la efectividad de otras ocasiones, algo que sí recuperó en el segundo parcial, lo que se notó en el número de juegos anotados. Tampoco Sanyo y Maxi estuvieron especialmente lúcidos en la estadística, pero ni siquiera les hizo falta sacar su mejor versión al verse ayudados en parte por los rivales.
Cabe resaltar, en este duelo, que Sanyo lo jugó tras enterarse de la muerte de su padre, por lo que hay que destacar aún más su profesionalismo y el hecho de que jugara a pesar de un momento tan triste y doloroso. D.E.P.
Con todo ello, nos quedan las siguiente semifinales:
Javi Ruiz – Uri Botello vs. Juan Cruz Belluati – Juan Lebrón (no antes de las 11 horas)
Maxi Sánchez – Sanyo Gutiérrez vs. Matías Díaz – Ale Galán (no antes de las 19:30 horas)
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