La tenemos, por fin ha llegado lo que hemos ido alimentando toda la semana. España y Argentina están en la final del Mundial Absoluto. Los dos mejores equipos, libra por libre y nombre por nombre pelearán una vez más por ser los mejores del mundo, tanto en mujeres como en hombres.
Una final que en mujeres servirá para desempatar, pues ambos equipos cuentan con nada más y nada menos que ocho mundiales, mientras que en chicos la cuenta va 11-4 favorable a Argentina. Pero España quiere revancha de la edición anterior.
En un día en el que durante un minuto que pareció una eternidad, todas las voces se callaron y solo se escuchaba el sonido de la noche en Catar; un sentido y merecido homenaje a todas las víctimas del terrible desastre natural de Valencia. El pádel quiso ser solidario una vez más, y tanto el presidente de la Federación Internacional de Pádel, Luigi Carraro, como su homólogo en la Federación Española de Pádel, Ramón Morcillo, y el secretario general de la Federación de Tenis de Qatar y presidente de Padel Asia, Tariq Zainal, fueron las cabezas visibles de este silencioso recuerdo.
Tras esto, la jornada de semifinales, con la bola rodando a toda velocidad y encendiendo la emoción.
Salida en tromba de España ante Portugal. Pocas o ninguna opción dieron las españolas a las lusas en un nuevo ejercicio (al menos en parte) de mezclas por parte de la seleccionadora Icíar Montes.
De entrada, Claudia Fernández y Gemma Triay dejaron casi sin producir a Margarida Fernandes y Catarina Castro (6-1 y 6-0). Luego tocó la prueba, Alejandra Salazar y Bea González, pareja que jugaba su segundo partido juntas y que nuevamente encontraban un rendimiento fantástico (6-0 y 6-1).
El tercer punto, que iba a tener como protagonistas a Paula Josemaría y Ari Sánchez ante Patricia María Ribeiro y Catarina Santos no se disputó al final, quedando un global de 2-0.
En el equipo de Argentina, gran rival para España en la lucha por el oro, puso como su primera baza a Aranza Osoro y Julieta Bidahorria, viéndose las caras con Chiara Pappacena y Giulia Sussarello, ante las que sacaron adelante un partido muy apurado (6-4 y 6-4).
Acto seguido, Delfi Brea y Claudia Jensen obtuvieron el segundo punto ante Carolina Orsi y Giorgia Marchetti (6-4 y 6-1). Tampoco jugarían en este caso el tercer punto, por lo que descansaron Virginia Riera y Daiara Valenzuela.
Hablando de España en chicos, por primera vez en todo el torneo disputó los tres puntos, llevándoselos todos ante Italia.
El primero se lo anotarían Juan Lebrón y Arturo Coello (6-1 y 6-1 ante Facundo Domínguez y Lorenzo Di Giovanni), y el segundo lo escribieron con un 6-1 y 6-0 Ale Galán y Jon Sanz (derrotando a Giulio Graziotti y Riccardo Sinicropi).
El tercero fue obra de ‘Coki’ Nieto y Miguel Yanguas merced a un 6-1 y 6-1 sobre Michele Bruno y Aris Patiniotis.
Los ‘SuperPibes’ sufren en su regreso
En el caso de Argentina, en esta ocasión únicamente disputaron dos encuentros, uno de ellos con tensión hasta el final. Martín Di Nenno y Franco Stupaczuk se reencontraron para sufrir ante los hermanos Miguel y Nuno Deus. Estos empezaron con el pie cambiado (6-1), pero poco a poco fueron entrando en dinámica y se recuperaron, subiendo el nivel y poniendo en apuros a los ‘Súper Pibes’, a quienes obligaron a ir al tie break para ganárselo y dejar la definición para el tercero (6-7).
Allí siguieron con su nivel mientras que Di Nenno y Stupa intentaban tomar la delantera y abrir brecha en el marcador, algo que solo consiguieron con un break que les otorgó el primer punto (6-4).
Todo lo contrario ocurrió con Agustín Tapia y Fede Chingotto, autores de un 6-0 y 6-1 ante Diogo Jesús y Vasco Pascoal.
Las notas más positivas de la jornada fueron, sin duda, la enorme victoria de Suecia ante Francia, un trabajo fabuloso de toda la selección, que demostró un gran crecimiento respecto a la pasada edición, con Carolina Navarro como gran capitana y referente.
Precisamente la malagueña conseguía el primer punto junto a Sofia Arvidsson ante el binomio galo compuesto por Lucile Pothier y Charlotte Soubrie (6-7, 7-6 y 6-3).
Un gran trabajo teniendo en cuenta el calor reinante, que dificultaba mucho el juego, y más dentro de la pista, donde la temperatura se concentraba más si cabe.
Después llegaría la victoria de Francia de la mano de Alix Collombon y Jessica Ginier (6-2 y 6-2 ante Baharak Soleymani y Juni Sjöland), para llevar todo a la definición del tercero. En este partido formaban por parte del combinado nórdico Amanda Girdo y Linnea Björk, mientras que por parte de las francesas, Carla Touly y Léa Godallier, quien ya el día anterior cedió en el punto definitivo ante Portugal y terminó impactando en varias ocasiones con su pala en el banquillo fruto de la rabia y la impotencia. Esta vez tampoco tuvo suerte y su rendimiento y el de su compañera fue de más a menos, acabando con varios errores no forzados y perdiendo por 6-3 y 6-1.
Quienes no tuvieron suerte fueron las chicas de Japón, que se quedaron a las puertas de seguir peleando por el noveno puesto, cayendo por 2-0 ante Dinamarca.
También muy destacable fue la victoria de Brasil ante Francia en el cuadro masculino (2-1), merced al registro de Julio Julianoti y Lucas Campagnolo (6-0 y 6-4 ante Thomas Leygue y Timeo Fonteny) y el de Lucas Bergamini y Francisco ‘Chico’ Gomes (6-7, 6-1 y 6-2 sobre Damyan Guichard y Manuel Vives), dándole la vuelta al punto obtenido por el combinado europeo gracias a Johan Bergeon y Bastien Blanque (6-2, 4-6 y 6-1 frente a Lucas Da Cunha y Matheus de Ávila).