Este pequeño país de la costa atlántica de África comienza, poco a poco, a dar verdaderas muestras de que el pádel es un deporte global y que puede conquistar cualquier territorio. No hace tanto, pocos pensarían que en Senegal podría jugarse al pádel, pero lo cierto es que, a día de hoy, su aceptación está a un gran nivel.
Y la culpa de ello la tiene un club, Padel Senegal, en la región costera de Saly, pionero en llevar una prueba internacional de la mano del International Padel Experience by Madison este pasado 2017 y que parece haberle cogido el gustillo a eso de disputar torneos, algo que han querido aprovechar las marcas para comenzar a desembarcar en este país y en toda África.
Su director y máximo responsable, Jordi Rovira, es además el vicepresidente de la recientemente fundada Asociación de Pádel de Senegal, una muestra más de que quieren hacer las cosas bien desde el principio, organizando unas infraestructuras que permitan crecer y profesionalizarse, y ahora, nos acercan dos pruebas más.
La primera se trata de unas jornadas de entrenamiento de la mano de durante cuatro días, entre el 18 y el 21 de este mes, se hará acompañar de Juanlu Blanco, director deportivo de la Academia de Marta Marrero en Augusta Pádel para impartir sus conocimientos sobre técnica y táctica y preparación física a los interesados, además de un partido de exhibición el día 20 por la tarde.
Y por si fuera poco, también desembarcará la firma Black Crown, en esta ocasión de la mano de un torneo, la segunda edición de su Challenge que ya el año pasado superó todas las expectativas y fue muy aplaudido por los asistentes, que llegaron también desde España y otros puntos de Europa. Esta competición comenzará el día 20 y se alargará hasta el 28, momento en que se disputarán las finales y se entreguen los trofeos a los mejores.
No cabe duda que Padel Saly está abriendo las puertas a la llegada del pádel en África y esperamos que pronto otros lugares se sumen a su gran iniciativa con igual dedicación y esfuerzo.
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