Cómo cuesta entender el pádel, sobre todo, en muchas ocasiones, a chicos jóvenes con talento que se ven superados por gente que peina canas.
La experiencia te la dan ellos, esos jugadores los cuales se mueven poco pero saben a qué juegan, esos jugadores que usan la fuerza y potencia de los rivales para contragolpear, aquellos que eligen jugar al centro un smash o dejan que un globo complicado, que pueden rematar tranquilamente, les sobrepase para volver a comenzar el punto; individuos que no caen en la trampa de sacar la bola por 3, que saben ver el nerviosismo y la falta de paciencia del rival, que son inteligentes y que saben que usando dos golpes pueden manejarte un partido a su ritmo y conveniencia.
En fin, jugadores que saben no fallar bolas no forzadas y saben elegir cuándo apretar y cuándo aflojar.
Inclusive jugadores hoy consagrados y profesionales han pasado por las manos de estos jugadores y sacaron experiencia de ellos sumado entrenamiento y un buen coach, ese entrenador que te hace ver esto y, aunque en ese momento pienses que no es así, a lo largo de tu vida le darás la gracias porque pasarás a ser un jugador con experiencia, un jugador que sabe usar la táctica y la estrategia en momentos claves, donde sabrás ver la jugada un poquito antes que tu rival.
Esa es la historia, la prisa en este deporte muchas veces hace hasta que abandones o que lo pienses y pasar etapas es pasar a tener cada día más experiencia.
Depende del jugador y también depende del coach que te haga ver esto y ‘golpearte’; muchas veces habrá discusiones o ideas que no sean compartidas y de eso se trata, de trabajar en equipo!
Eso sí, sin saltarte la raya y sabiendo que el entrenado eres tú y el coach es él.
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