Pádel madrileño de la mayor altura y calidad. Eso es lo que se ha podido ver estos días en el alcalaíno Ball Padel Indoor, instalación que ha albergado la primera cita del circuito madrileño absoluto de la Federación Madrileña de Pádel.
En total han sido 123 parejas divididas en tres categorías de chicos y dos de chicas, todos ellos con grandes dosis de calidad y demostrando una vez más que el nivel de las palas de la capital está muy alto.
En lo que respecta a los diferentes cuadros, citar que este año en primera categoría se introducía una novedad, y es que tanto en los Grand Slam Oro como en los Plata, se podía solicitar, en el momento de la inscripción, entrar en el cuadro de primera categoría, algo que han aprovechado parejas no habituales de la competición para llegar al cuadro y presentar sus credenciales. Es el caso de Javier Concepción y Carlos Conde que, realizando un torneo excepcional, llegaban a semifinales desde la previa para brindar un fantástico espectáculo frente a los ‘Raúles’, Marcos y Díaz, quienes se hicieron con el encuentro por un emocionante 6-3, 3-6 y 6-1.
Precisamente estos últimos fueron los vencedores de la cita, por lo que este año lo han comenzado por la misma exitosa senda que terminaron el pasado. Y es que tras vencer a Concepción y Conde, se veían las caras en la final con Kike Lagarejos y Mario Huete, quienes en semis dejaban sin premio a Willy Castañón y Javier Redondo en un partido de alto voltaje que se decantó en el tie break del tercer set, para después derrotar en semifinales a Peter San Román y David García Campos por un cómodo 6-4 y 6-2.
En la citada final, Lagarejos y Huete intentaron plantar cara a los ‘Maestros’, pero ni Díaz ni Marcos se arrugaron lo más mínimo y, agresivos en la red y sin fisuras atrás, no dieron opción a sus rivales, adjudicándose la final por 6-2 y 6-4.
Las chicas demostraron que tienen calidad a raudales
Si hablamos del cuadro femenino, las cosas tuvieron características muy similares en cuanto a igualdad y emoción. Las vallisoletanas Alicia Blanco y Beatriz Caldera han sido la sorpresa de este Grand Slam Oro. Entraban con un ‘wild card’ en la primera categoría para estrenarse en un torneo FMP y anotarse la victoria, demostrando que el pasado aó habían conseguido merecidamente los premios a ‘Mejor Jugadora Absoluta’ y ‘Mejor Jugadora Promesa en Castilla y León’.
Muy meritoria fue su actuación en semifinales. Con su juego firme y ordenado, daban la campanada dejando en la cuneta a Carla Mesa y Marta Talaván, cabezas de serie número uno del torneo, en un emocionante enfrentamiento, por 6-4 y 7-6.
Ya en la final se enfrentaban a la dupla 2 del cuadro, las jóvenes Ainhoa Rico e Irene Arzamendi, que venían de derrotar a Laura Clergue y Meli García Truchado en semifinales (7-6 y 6-2). Tras los nervios iniciales, Blanco-Caldera se adjudicaron un igualado primer set. Reaccionaban sus rivales en la segunda manga, poniendo tablas en el marcador por el mismo tanteo. Pero al inicio del tercer set las vallisoletanas pisaban el acelerador, anotándose el duelo más disputado de estas finales por 6-4, 4-6 y 6-1.
2ª categoría
Los campeones masculinos de segunda categoría Iván Ramírez y Álvaro Cañasveras, superaron a sus rivales Álvaro Sacristán y Jorge Rodríguez, adjudicándose la final de esta categoría por 6-1 y 6-4.
En categoría femenina, Alba Sánchez y Raquel Villa se apuntaron el triunfo al derrotar a Marina Merino y Brenda Guijarro 6-1 y 7-5.
3ª categoría
En la última categoría de este Grand Slam Oro, Jorge Juan y Javier García, se proclamaban campeones tras imponerse 6-0 y 6-4 a Mario Lloret y Rubén Castro en la final.
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