La final femenina la disputaron las dos mejores parejas del año libra por libra, el cuarteto más en forma y con mejores armas a día de hoy. Las dos parejas más regulares del femenino, la pareja uno frente a la pareja dos y con el número uno del mundo en juego (al menos de manera matemática).
Eso sí, quienes ganaron fueron las de casi siempre, Ari Sánchez y Paula Josemaría, quienes se proclamaron pareja número uno por segundo año consecutivo tras vencer en de manera ajustadísima a Gemma Triay y Claudia Fernández, consiguiendo además un hito en su carrera.
El choque resultó un duelo que se ha repetido a lo largo de la temporada hasta en diez ocasiones y que tenía el marcador igualado a cinco entre ambas parejas. Era el momento de desempatar.
Ambas parejas cedieron su servicio en el inicio del partido, arrancando el encuentro con una rotura para Ari y Paula y la posterior respuesta de Gemma y Claudia (1-1). Ambas parejas se mostraban serias, pasaban los minutos, los puntos, los juegos y el marcador seguía mostrando igualdad, incluso solventando opciones de quiebre de las rivales (4-4).
En el momento más importante del acto, en el noveno juego, llegó el quiebre de Sánchez y Josemaría a causa de dos winners en bajada de pared de esta última y por dos errores no forzados de Claudia (5-4); la respuesta de las pupilas de Gaby Reca fue inmediata tras el paso por banquillos con otra nueva rotura (5-5). En el undécimo juego Ari y Paula dieron una vuelta de tuerca más quebrando a sus rivales y a la tercera fue la vencida, consolidando su servicio con una bajada pared de Paula Josemaría (7-5).
La segunda manga no solo mantuvo la paridad en el marcador entre las dos parejas, sino que además experimentó una crecida de nivel de Gemma Triay, quien tras un primer parcial con algún momento más intermitente, decidió echarse al equipo a la espalda. El crecimiento en el partido de la menorquina obtuvo resultado instantáneo; la dupla número dos quebró en el cuarto juego del set, pero al igual que en la primera manga golpearon de vuelta sus rivales (2-3). Tras el paso por banquillos llegó un nuevo quiebre que ponía de nuevo tierra de por medio para la menorquina y la madrileña (2-4) y esta vez sí que lo confirmaron, quedándose así al resto para llevarse el segundo set (2-5).
A partir de ese momento, las chicas de Ángel González sacaron su carácter de número uno a pesar de los problemas físicos en la rodilla de Josemaría y cosecharon tres juegos consecutivos, dos al servicio y un break que les daba vida en el segundo set hasta poner el 5-5 en el marcador. Con esta remontada ‘el momentum’ de ambas duplas se intercambiaron, Ari y Paula no paraban de crecer y cuando se llegó al tie break así lo demostraron, el marcador reflejó al finalizar el mismo un 7-1 contundente a su favor.
Con el marcador ajustadísimo como se preveía entre las dos mejores parejas del femenino, con un partido a la altura de lo que se estaban jugando ambas parejas, con un resultado de 7-5 y 7-6, Ariana Sánchez y Paula Josemaría repetían como pareja uno y además lograban su título número 36, lo que las coloca como la segunda pareja más laureada de la historia del pádel, superando a dos mitos como Fernando Belasteguín y Pablo Lima, y solo por detrás del propio Bela y Juan Martín Díaz.