Llegaron y, desgraciadamente para ellas, a las primeras de cambio tuvieron que despedirse. Tras su buen resultado en el debut del anterior torneo, Marta Marrero y Aranza Osoro no han encontrado en el Major de Italia la consistencia necesaria para vencer en su primer partido.
Las culpables han sido Águeda Pérez y Patricia Martínez, en un partido con dos versiones muy diferentes; una primera parte en la que supieron sufrir y en la que, a pesar de obtener una estadística casi perfecta al resto, con hasta ocho oportunidades de break, únicamente aprovecharon dos de ellas, lo que no les permitió adquirir mucha ventaja, y una segunda en la que sí estuvieron más acertadas en esta faceta (3 de 4) y donde el margen fue, por tanto mayor, con la argentina y la canaria demasiado paradas y nubladas en el juego (5-7 y 1-6).
Tampoco fue un día para recordar en la memoria de Carolina Navarro. La malagueña volvía a la competición tras perderse unos cuantos torneos y lo hizo sin poder llevarse la victoria. Cierto es que para ella lo importante era volver a entrar en pista e ir recuperando sensaciones, pero también que es un animal competitivo y que, además, compartiendo dueto con una jugadora local, Carolina Orsi, la victoria hubiese sabido mejor, pues Carol no es de las que guste de perder. Desgraciadamente para ellas, cedían ante Giorgia Marchetti y Léa Godallier por 3-6 y 4-6.
Andrea Ustero y Alejandra Alonso necesitaron sobrepasar las dos horas e juego para dejar fuera a la sorpresa del día anterior, Bárbara Las Heras y Victoria Iglesias. Un choque de alternancias y dominio constante, de oportunidades para los dos bandos, y de mucho volumen de juego.
Ustero y Alonso golpearían primero en el único parcial iguala que hubo, el cual rozó el tie break pero que se esquivó por muy poco (7-5), para luego entrar en una fase de »montaña rusa» en la que unas controlaron todo a la perfección (Bárbara y Victoria) y otras se limitaban a defender y encadenar puntos y juegos en contra, lo que se convirtió en el 1-6 que puso de nuevo el empate.
La tendencia cambiaría, siendo ahora las dos jóvenes las que cogían el timón del partido al tiempo que Las Heras e Iglesias veían escaparse las oportunidades de vencer al no encontrar continuidad al juego desplegado en el set anterior. Con una mejora más que notable, Alejandra y Andrea se recomponían del golpe y, apretando desde el resto, finiquitaban la resistencia de la madrileña y la andaluza (7-5, 1-6 y 6-2).
También con tres tres parciales comenzaría la aventura temporal (aunque de duración por el momento indeterminada) de Delfi Brea y Alba Gallardo. La dupla, unida debido al trombo que sufre Bea González y del que no sabes cuánto tiempo le tendrá fuera de las pistas, chocaba con Lara Arruabarrena y Julia Polo y aunque empezaba con buena sintonía (6-3), en el segundo cedía terreno y dominio para encajar el empate (7-5).
Un empate que les obligó a estar más minutos en pista y pelear, notándose las costuras de la pareja, algo lógico, debido al poco tiempo de preparación. Gallardo, no obstante, supo manejarse bien en la presión y alimentar a una Delfi que optó por cambiar de lado y pasarse al revés, desde donde fue creciendo para al final, aunque tuvieran que llegar al desempate, llevarse el premio a cuya puerta llamaron una y otra vez Arruabarrena y Polo, dos que jugaron muy bien, supieron apretar ante una dupla de nueva formación pero terminaron sin premio tras 2:48 horas de partido (3-6, 7-5 y 6-7).
Remontada de Sandra Bellver y Marta Borrero ante Nuria Rodríguez y María Eulalia Rodríguez, contra pronóstico, pues estas últimas partían como pareja 12 y, además, iniciaron la contienda con una estadística perfecta, un 0-6 que demostraba unión, acierto y mucha pegada.
Sin embargo, lejos de venirse abajo, Bellver y Borrero fueron poco a poco remando, subsanando errores y mejorando en defensa, subiendo más a la red y llevando el partido a su terreno para sacar poco a poco la cabeza y remontar el marcador adverso.
Del 0-6 se pasó a un 6-4 y, posteriormente y tras superar también las dos horas de juego, al 7-5 que les metía en la siguiente ronda.
Para terminar, una victoria complicada y de altibajos para Martita Ortega y Vero Virseda, dupla que podría estar viviendo sus últimos coletazos si se confirma la rumorología que apunta a una vuelta de la madrileña con Sofia Araújo, y que, quizá por ello, sufrió ante Marta Barrera y Marta Caparrós a pesar de la evidente diferencia en el ranking (6-3, 3-6 y 6-3), y derrota contra pronóstico de Alejandra Salazar y Carmen Goenaga ante Carla Mesa y Sara Ruiz.
Se presentaba Salazar en Roma tras no haber podido estar el año pasado y hacerlo, además, con compañera de circunstancias, la joven Carmen Goenaga, ante la lesión de Tamara Icardo.
El experimento, aunque peleó todo, no terminó consiguiendo una victoria que se antojaba casi como obligatoria, pues Mesa y Ruiz salieron con todo y acabaron pescando en la incertidumbre que ofrecieron Salazar y Goenaga sobre todo en la segunda manga, donde cometieron más fallos de los recomendados si se quiere remontar un partido (6-7 y 3-6).
Los resultados más amplios fueron estos:
Ari Sánchez – Paula Josemaría vs. Sofía Saiz – Marina Martínez Lobo (6-1 y 6-2)
Marta Arellano – Carla Castillo vs. Gemma Triay – Claudia Fernández (3-6 y 1-6)
Virginia Riera – Sofia Araújo vs. Chiara Pappacena – Xénia Clascá (6-0 y 6-3)
Helena Wyckaert – A López vs. Marina Guinart – Araceli Martínez (2-6 y 2-6)
Ari Cañellas – Teresa Navarro vs. Ksenia Sharifova – Lucía Martínez (5-7 y 1-6)
Raquel Eugenio – Martina Fassio vs. Bea Caldera – Lorena Rufo (5-7 y 2-6)
Marta Talaván – Ana Catarina Nogueira vs. Carlotta Casali – Arantxa Soriano (6-0 y 6-3)
Jessica Castelló – Claudia Jensen vs. Alix Acollombon – Julieta Bidahorria (6-4 y 6-2)
Esther Carnicero – Melania Merino vs. Patty Llaguno – Lucía Sainz (2-6 y 0-6)