La lógica, esta vez sí, ganó a la sorpresa, y los favoritos al título en cada eliminatoria se mostraron dispuestos a no dejarse llevar y verse en serios aprietos, visto lo sucedido durante toda la semana.
Las gradas repletas y sin un aisento libre en la Plaza Mayor de Valladolid dejaron a Fernando Belasteguín junto a Pablo Lima y a Paquito Navarro con Matías Díaz, como finalistas y parejas dispuestas a conseguir el título.
Dos partidos rápidos y sin mucho misterio, pero con cuatro jugadores entregaod spor completo al pádel; así fueron las semis de Valladolid, donde las aprejas 1 y 3 del mundo confirmaron una vez más sus buenas sensaciones.
En la primera de ellas, Ernesto Moreno y Javier Limones poco pudieron hacer ante Bela y Lima, solo contemplar el espectáculo. Solo tres errores por parte de los líderes de la tabla sirvió para que, gracias a su pádel sin resquicios ni fisuras, metiesen en su zurrón el primer set en 23 minutos.
El segundo set parecía transitar por los mismos derroteros, cuando los número 1 conseguían un tempranero break. Pero la inmediata reacción Limones-Moreno, rompiendo el servicio del brasileño Lima, arrancó los aplausos del público que deseaba que el espectáculo se extendiera.
Sin embargo, ya se sabe que es malo despertar al león, y las consecuencias lógicas las pagaron Limones y Moreno. Lima y Bela imprimieron de inmediato otra velocidad, machacaron a sus rivales y con un nuevo break y acabaron por cerrar la eliminatoria en poco más de 50 minutos (1-6 y 4-6).
Ruiz-Marina, despedida a la pareja del futuro
En la otra semifinal, los jóvenes Alejandro Ruiz y Matías Marina no se amilanaron ante el poderío de sus rivales, y salieron a jugar de igual a igual, dejando detalles de exquisita calidad, los que les han valido apra hacerse con una prueba Challenger y que les han valido para llegar hasta semifinales.
El marcador de 6-3 y 6-2 puede parecer más abultado de lo que en realidad se vio en la pista central, ya que los cuatro jugaron a un alto nivel, pero finalmente se impuso la mayor pegada y experiencia de la dupla número dos.
Inicio muy igualado, donde Ruiz-Marina fueron los primeros en disponer de una bola de break, en el primer juego al saque del sevillano y aguantaron el tipo hasta el octavo juego, cuando Navarro-Díaz no desaprovecharon la primera bola de ruptura que tuvieron.
Ya en el segundo, las cosas se presentaron más fáciles para Paquito y Matías con los breaks en el tercer y quinto juego, que pusieron las cosas muy cuesta arriba para los jóvenes debutantes y que terminaron por hincar la rodilla en el suelo y ver cómo sus oponentes llegaban a la final, entre los aplausos del público.
Hoy, a partir de las 12 horas, se volverán a ver las caras las dos mejores parejas de esta temporada. Será la cuarta final para Navarro-Díaz y la segunda consecutiva para Bela y Lima. Mucha suerte a los cuatro y enhorabuena también a las dos parejas semifinalistas.
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