Iciar Montes, retirada en silencio

A finales del pasado año saltaba la noticia de la retirada de la competición al más alto nivel de Iciar Montes, compañera de Alejandra Salazar. Ahora, desde World Padel Tour, han querido, a través de una entrevista, rendir un pequeño tributo a una jugadora que no ha querido ningún reconocimiento.

Debería haber tenido su gran homenaje, como los mejores jugadores cuando anuncian su retirada. Pero ella no lo quiso así, prefirió irse en silencio, sin cámaras, sin luces, con la sencillez que siempre le caracterizó. Optó por comunicarlo a través de las redes sociales, el día antes de Navidad, cuando más inadvertida podía pasar. Iciar Montes, una de las mejores jugadoras de todos los tiempos, colgó su pala a los 39 años para convertirse ya en leyenda de este deporte.

Ha pasado ya un mes desde el sorprendente anuncio: «La decisión no fue de la noche a la mañana, es algo que venía madurando desde hace tiempo», aclaró la madrileña nada más comenzar el diálogo, recalcando una y otra vez que «por mi forma de ser, muy reservada, preferí no ir diciendo por ahí que me iba a retirar».

Tenía contrato de patrocinio y compromiso con las marcas para esta próxima temporada, pero esto tampoco influyó en su decisión: «Debo agradecer la confianza de todos, pero creo que llegó el momento de dejar la alta competición», de decir adiós a las pistas después de 21 años y con un palmarés inigualable.

Formó pareja con ocho jugadoras a lo largo de su carrera: Araceli Montero, Belén Castrillo, Carolina Navarro, Neki Berwigg, Paula Eyheraguibel, Cata Tenorio, Patty Llaguno y Alejandra Salazar. Y para cada una de ellas tuvo palabras de reconocimiento a través de su Facebook.

Prefirió no resaltar a una más que a otra, pero sí reconoció que tal vez uno de los mejores momentos de su carrera los vivió junto a la brasileña Neki Berwig. «Fue una de  las mejores etapas. Ha sido con la compañera que más años jugué y estuvimos mucho tiempo como números 1». En su descripción sobre Neki, la madrileña destaca su visión de juego, el despliegue físico y el poder mental y como anécdota recuerda que «en el tercer set de una final le digo: Neki, creo que me está dando una pájara. Me miró y me respondió: Yo llevo con pájara desde el primer set así que ponte a jugar!».

Su punto más fuerte… el trabajo

Una estratega dentro de la pista, sabiendo manejar los tiempos y con una mano prodigiosa. Consultada sobre cuál considera que ha sido su punto más fuerte, Iciar dijo que «el trabajo. Han sido muchas fases durante estos más de 20 años, jugando en las dos posiciones. Creo que mi punto más fuerte ha sido compenetrarme con el juego de mi compañera, hacer equipo, sacar el 100% de la persona que estuviera a mi lado. Dos ingredientes para formar un nuevo plato. Me cuidaba mucho a nivel físico, trabajé el aspecto mental estando muy enfocada en los objetivos. Así entendí el pádel».

Y un pilar en su carrera ha sido sin lugar a dudas su hermano Chema. «Me faltan palabras para hablar de mi hermano. Siempre me ha apoyado de manera incondicional. He tomado decisiones en las que tal vez no estuviera de acuerdo, pero estuvo siempre a mi lado. Se valora poco tal vez la tarea de un entrenador, pero implica una gran responsabilidad. Mi hermano ha sido insustituible y lo bueno es que entendemos el pádel de una manera parecida».

El futuro

Qué será de la vida de Iciar a partir de ahora? La pregunta era inevitable: «Me pondré el mono de trabajo como una más (risas) Será éste un año de reestructuración, ver qué proyectos me motivan. Mi vida seguirá relacionada al pádel, haré algún evento, pero primero tendré unos meses para dedicarle a la personal sin dejar de hacer el ejercicio físico pero con más libertad».

En tal sentido no descartó entrenar en el futuro a jugadoras profesionales, porque se siente capacitada para «transmitir mi experiencia a la gente que está en la alta competición».

Por último hizo referencia a la actualidad del pádel femenino, destacando que «va creciendo a la par que el masculino. Se juega más rápido y más fuerte. Creo que en los próximos tres años habrá cambios más rápidos que los vividos en la última década. Una revolución como ocurrió en el tenis femenino, porque hay jugadores muy jóvenes que vienen pisando fuerte y se jugará a más velocidad, pero sin perder la esencia del pádel».

Se ha ido de las pista una grande, una jugadora que será recordada por muchos años. Lo ha hecho en silencio, pero tendrá como todos su merecido homenaje, porque además Iciar Montes seguirá vinculada a este deporte. Gracias Iciar!