La segunda ronda de 1/16 de final (aunque en realidad sería la de octavos por mucho que desde Premier Padel se empeñen en llamarla así al desdoblarla en dos jornadas) fue una auténtica locura en el cuadro masculino. La revolución que en Bruselas ya asomó tímidamente, aquí fue una realidad y aunque no cayeron todos los pesos pesados que tuvieron complicaciones, sí que se llevaron un serio aviso.
La alegría mayor se la llevaron al cuerpo Enrique Goenaga y Teo Zapata, una dupla que ya dio síntomas a principios de año de buen juego y, además, de ser capaces de obtener buenos resultados (en Riad llegaron a esta misma ronda y en Catar cedieron una antes pero ante los ganadores finales, Coello y Tapia). Su esfuerzo está dando sus frutos y en Sevilla lo han vuelto a demostrar, porque de un plumazo han borrado de la ecuación a Juan Tello y Fernando Belasteguín (cierto que en su caso volvía tras una lesión y todavía le faltaba ritmo de competición); sin embargo, eso no ha de quitar mérito alguno a su puesta en escena.
Y es que en la primera manga, tras llegar ambas duplas empatadas a todo, se citaron en el tie break, donde Goenaga y Zapata estuvieron inconmensurables, perfectos, logrando un 7-0 sublime para llevarse el set (7-6), si bien responderían con la garra que les caracteriza tanto Bela como Tello.
A base de empujar juntos y de encontrar premio a su insistencia, los argentinos igualaron el marcador (5-7), pero ya en el tercero, su físico (especialmente el de Bela) decaería y eso dio alas a Enrique y Teo para venirse arriba y abrir brecha con el único break que campearía en este tercer parcial. Margen suficiente para ver la luz al final del túnel y llegar los primeros a la meta en medio de la alegría generalizada y el abrazo por el trabajo bien hecho (7-6, 5-7 y 6-3).
Salvo Ale Galán y Fede Chingotto, quienes parecen confortablemente asentados en la tranquilidad y en la resolución rápida de sus encuentros (6-1 y 6-2 ante Antonio ‘Pincho’ Fernández y Javi Barahona), al resto del top 5 las cosas se le pusieron algo más cuesta arriba.
Arturo Coello y Agustín Tapia se encontraron con la oposición de Nacho Sager y Salva Oria en los primeros compases hasta que consiguieron soltarles y entonces ya la pista fue un tranquilo sendero para ellos. Tras obtener un 7-5 y escaparse del desempate, se les vio más sueltos en el segundo, donde se lanzaron antes a obtener ventaja y a asegurarla con su servicio (7-5 y 6-3).
Marcador muy similar se llevarían Paquito Navarro y Juan Lebrón ante unos emergentes Tino Libaak y Leo Augsburger, dupla que fue de menos a más y que tuvo oportunidades para alargar más el choque, pero que no supo aprovecharlas. Su rendimiento en el primero no fue todo lo bueno que cabía esperar y tanto Paquito como Juan, bien llevados por la grada, supieron mandar en la pista, pero en el segundo, los dos argentinos decidieron subir la apuesta y arriesgar, encontrando premio a su osadía y forzando un tie break en el que las imprecisiones en el momento decisivo les costaron caras, así como un exceso de precipitación en el caso de Leo, y eso les privó de haberse ido al tercero (6-3 y 7-6).
Más problemas encontrarían Franco Stupaczuk y Martín Di Nenno, necesitando tres sets idénticos para dejar fuera a Edu Alonso y Álex Arroyo, cañoneros hiperactivos y más que dignos rivales. Un encuentro que, si en la primera manga apenas tuvo interrupciones de los restadores, con el saque asegurándose prácticamente en el 100% de las ocasiones, cambió por completo en el segundo, acumulando los ‘Súper Pibes’ hasta siete opciones de break pero consiguiendo únicamente una, lo que les dio vida a los españoles para empatar y regresar a la pista con opciones de pelear en un tercero que ya rondaba las dos horas de juego y que al final se decantaría para Martín y Franco por mera insistencia y por, esta vez sí, llevarse las dos roturas que se fabricaron (6-4, 4-6 y 6-4).
Para terminar con la cuota de batallas en La Cartuja, destacar la importante (y necesaria) victoria de Maxi Sánchez y ‘Sanyo’ Gutiérrez ante Miguel Semmler e Ignacio Vilariño. Los ‘Maestros’ consiguieron ser muy superiores en dos de los parciales, pero uno se les atragantó y les provocó que el partido no tuviese la resolución rápida esperada.
Vilariño y Semmler sacarían fuerzas en el segundo set forzando la muerte súbita en la que dieron una excelente imagen y por momentos encontraron máximas prestaciones y acierto total, pero en el tercero pagaron caro el esfuerzo (6-2, 6-7 y 6-3).
En cuanto al resto, Miguel Yanguas y Javi Garrido lograron superar con suficiencia su encuentro ante los argentinos ‘Lucho’ Capra y Álex Chozas (6-2 y 6-4) mientras que Álex Ruiz y ‘Momo’ González tampoco precisaron de un desgaste muy grande ante Lucas Campagnolo y Javi Leal (6-3 y 6-2).