Se les presentaron más de uno y más de dos problemas a algunos de los nombres propios del día. Muchas miradas estaban puestas en el estreno de la dupla Gemma Triay-Martita Ortega y en las sensaciones que fuesen a dejar sobre la pista. Y aunque en el inicio no fueron nada buenas, acabaron por sacar adelante su partido dominando a placer.
Llegan los 1/16 este miércoles y con ellos nuevas oportunidades de que salten las sorpresas.
El debut de Lorena Rufo y Claudia Fernández en el único torneo que van a jugar juntas (al menos salvo que vuelvan a unirse en el futuro) ha sido muy positivo. Llegar a la pista y dominar frente a Carmen Castillón y Raquel Piltcher con un contundente 6-3 y 6-1, aunque nada que ver con el monólogo que ofrecieron Delfina Brea y Bea González, quienes parecieron querer demostrar la misma imagen de solvencia que a finales de la pasada campaña.
Ante Carla Castillo y Lucía Peralta obtuvieron un 6-1 y 6-1 sin apenas desgastarse.
Victoria Iglesias y Bárbara las Heras, en su primera puesta de largo (aún con dudas por el rendimiento de la madrileña tras mucho tiempo lesionada) consiguieron espantar parte de las dudas y sonreir, algo que será seña de identidad de una pareja llamada a pelear y al menos presentar batalla. Frente a Águeda Pérez y Paula Martínez, conseguían un 6-4 y 6-2 muy contundente.
Más les costó a Aranza Osoro y Vero Virseda, otras que viven su primer y último torneo. Sus rivales en esta ocasión eran Carmen Goenaga y Lucía Martínez, pareja que siempre complica mucho los encuentros, algo que en esta ocasión no fue diferente y les obligaron a pelear hasta la última pelota, primer consiguiendo un solitario break y luego forzando el desempate (6-4 y 7-6).
Dos parciales idénticos se anotaron Ksenia Sharifova y Esther Carnicero, logrando dejar fuera a Lorena Alonso y Ana Varo con un 6-3 y 6-3 al tiempo que las nº1 del ranking, Paula Josemaría y Ari Sánchez, tras aclararse algunas dudas iniciales ante Marta Talaván y Nuria Rodríguez, salieron a dominar en el segundo set y acabaron arrasando (7-5 y 6-1).
A partir de ahí, llegarían los problemas para algunas de las favoritas en sus respectivos partidos; primero para Carolina Navarro y Marina Guinart, quienes tuvieron que echar el resto en el comienzo, en el medio y al final de la eliminatoria para conseguir ser mejores que Carolina Orsi y Marina Lobo, pues no fue fácil imponerse a su juego potente e incisivo (7-5 y 7-6).
Giorgia Marchetti y Sara Pujals se tuvieron que ir a los tres sets ante Sandra Bellver y Maria Eulalia Rodríguez, un choque de alternativas constantes y mucha ida y vuelta que pareció una montaña rusa en la que no se decidió a las ganadoras hasta el tramo final (6-4, 2-6 y 6-4).
Se les complicaría también la existencia a Marta Ortega y Gemma Triay, tanto que incluso perdieron la primera manga ante Melania Merino y Sofía Saiz. El hecho de despedirse en Riad pareció hacer mella en la química en los primeros compases, si bien caerían únicamente en el tie break tras mucho pelearlo (6-7). Encendidas todas las alarmas, la madrileña y la balear decidieron ir al unísono y dejarse las dudas en el banco.
Empezaron a moverse, a crear juego y a definir los puntos con solvencia para darle la vuelta al marcador y abrocharlo con un 6-3 y 6-0.
Para terminar, Lucía Sainz y Patty Llaguno también tuvieron que hacer frente a varios problemas, pues las jóvenes Noa Cánovas y Jimena Velasco »se les subieron a las barbas». A pesar de que la veteranía se impuso en la primera manga (6-4), no le perdieron Noa y Jimena la cara al encuentro en ningún momento, consiguiendo empatar la contienda con un 3-6 que dejaba todo muy abierto en la resolución del tercero.
Allí, punto a punto y juego a juego, Sainz y Llaguno monopolizaron la pelota y abrieron rápidamente brecha en el luminoso para no vivir un final apretado y tenso, venciendo con un 6-4, 3-6 y 6-1.