Tocaba encender los motores en Paraguay. El circuito A1 Padel regresaba a Suramérica para pisar la ciudad de Asunción, lugar emblemático para él tras los éxitos conseguidos en el pasado, con el público siempre respondiendo y los jugadores devolviendo el cariño con espectáculo.
Así se iniciaría la primera parte de los 1/16 de final, divididos en dos jornadas, con seis encuentros que tuvieron definición a tres sets en tres de ellos, además de dos tie breaks que supusieron una ronda peleada que dio la bienvenida a un torneo que apunta a ser de los más ajustados de la temporada.
Abrieron la lata de las hostilidades Javi Reiter y Alejandro Pérez peleando ante Diego P. Simón y Raúl Peralta y tras ganar los primeros el set inicial con un tie break en el que estuvieron sublimes, Simón y Peralta fueron capaces de devolver el golpe agigantándose en la pista y sacando a relucir todas sus virtudes, rompiendo en el tercer juego del segundo y consiguiendo una ventaja aún mayor en el tercero (7-6, 3-6 y 1-6).
Facundo López y Andrés Britos se llevaban dos sets con autoridad máxima ante Daniel Blanco y Rodrigo López en un ejercicio prácticamente perfecto de ataque y defensa. Sin embargo, en el set intermedio, el segundo, se veían contestados por Blanco y López, por lo que necesitaban un esfuerzo extra y alargar su partido (6-1, 3-6 y 6-1).
Martín Abud y Relis Ferrerya, por contra, no tuvieron apenas problemas para dejar en la cuneta a Joaquín De Astoreca y Máximo Maldonado (6-3 y 6-2), igual que les ocurrió a Daniel Martínez y Joaquim Florensa, claros ganadores ante Adrián Miranda y Fernando Lavall (6-0 y 6-1).
Sensaciones totalmente opuestas para Alejandro Urzola y Óscar Guiral, muy exigidos frente a la dupla compuesta por Santiago Rolla y Yain Melgratti, hasta el punto de que ya el primer capítulo se decidió por un tie break y el segundo estuvo a punto de llevar el mismo camino (7-6 y 7-5).
Para finalizar, Adrián Pérez y Cristian Ozán se llevaron un encuentro duro, correoso, de constantes altibajos y de los que te obligan a estar muy concentrado en todo momento; sus oponentes, Tomás Cheda y Alfonso Sánchez, no les dieron ninguna concesión y les obligó a no relajarse ni a dejar ninguna pelota sin pelear (5-7, 6-3 y 6-3).
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