Mendoza tendrá este domingo la final soñada, la de las dos parejas que más en forma se han mostrado en esta primera mitad de temporada. Duelo de jóvenes, de pádel diferente pero igualmente efectivo. La nueva generación de jugadores representada por sus cuatro máximos exponentes.
Franco Stupaczuk y Martín Di Nenno comparecían en la central ante Álex Ruiz y Juan Tello, de nuevo sorpresa como ya lo fueran en Madrid, demostrando que las últimas semanas han servido para unirles y darles un extra de rendimiento.
Con la grada dividida por tener compatriotas a ambos lados pero inclinándose ligeramente hacia el de los ‘Súper Pibes’, empezaron las hostilidades y tanto el primer set, que terminó fraguándose con solo un break de diferencia en favor de un Ruiz y un Tello que se mostraron correosos (6-4), como el segundo, en el que hubo que irse al tie break tras concluir los 12 juegos reglamentarios sin diferencia alguna, peleando cada bola y solventando con control Stupa y Di Nenno y dosis de fantasía la mayor pegada de sus rivales y su enorme fortaleza física.
Ahí, en el desempate, los de Carlos Pozzoni encontrarían mayor efervescencia y acierto, consiguiendo un 6-8 que es permitiría llevarse la muerte súbita (6-7) en la que también hubo que tirarse de cabeza constantemente para evitar que los contrarios hicieran puntos con regularidad, todo ello para delicia de una grada entregada al show.
Finalmente llegaría el tercero pero aquí se apagaron las luces de Álex y Juan, cansados física y mentalmente, faltos de ideas y de premio a sus escasos e irregulares ataques, que se topaban siempre con un magnífico Di Nenno en defensa y las recuperaciones de un Stupa que ejercía de ‘box to box’, cumpliendo atrás y siendo muy solvente adelante, para anotarse varios breaks y terminar por conseguir el ansiado billete a la final en casa (6-4, 6-7 y 1-6). Los ‘Súper Pibes’ ya no son un proyecto, sino una realidad.
Delante estarán los habituales, los de siempre, Arturo Coello y Agustín Tapia quienes, en un partido que perfectamente podría haber sido una final anticipada (pues se enfrentaban a Ale Galán y Juan Lebrón), ofrecieron un rendimiento excelso y juegan ya con total soltura y sin miramientos hacia los demás.
Aquí el partido duró a mitad que el otro, apenas una hora, lo que tardaron Coello y Tapia en empezar a manejar cada vez más, a soltarse en la central y a soltar a sus oponentes, que fueron de más a menos; muy bien al principio los españoles, viendo una versión suya como la de antaño, con recursos en ataque y mucha movilidad atrás, pero que se chocaba en esta ocasión con su evolución al otro lado de la red.
Arturo y Agus no paraban de percutir una y otra vez hasta que lograron el premio del break, el que les abrió ya todo el encuentro, pues les sirvió primero para llevarse el parcial inicial (4-6) y después para golpear muy duro a los cabezas de serie nº1, quienes en el segundo set no respondieron de igual manera. Incapaces de aguantar el vendaval, fueron mermando sus estadísticas y acabaron claudicando con un 4-6 y 2-6 para dejar el billete a la Final a Coello y Tapia y ellos volver a España para tomarse unas merecidas y muy necesarias vacaciones pensando en volver mejorados en septiembre.
Duelo por todo lo alto con jugadores locales siendo mayoría pero con las que, hoy por hoy, son las dos mejores duplas del circuito por estado de forma y sensaciones. ¿Quiénes conseguirán levantar el título en tierras argentinas?
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