Un día de doble sesión saludó a las jugadoras en Marbella. En el torneo que supone el segundo Master de la temporada tras el de Abu Dhabi celebrado allá por febrero, la emoción ha vuelto a subir y a obligar a las jugadoras a dar lo mejor de sí para seguir lo máximo posible en liza.
Tocaba pelear para intentar llegar al cuadro final y sumar un buen número de puntos pero, obviamente, no todas iban a conseguirlo. ¿Quiénes obtendrían el premio?
Totalmente opuestas fueron las sensaciones de Sandra Hernández y Martina Fassio para lograr su doble victoria. Primero, un remanso de paz ante Cristina Carrascosa y Mireia Herrada, un 6-2 y 6-0 que les permitió ganar holgadamente y sin apenas desgastarse. Después, por la tarde, ante Patrícia Ribeiro y Letizia Maria Manquillo, las cosas se complicaron más de la cuenta y no se pudieron permitir tantos lujos, teniendo que apretar en cada golpe y estar concentradas de principio a fin, primero para imponerse en el tie break y luego para sortearlo por los pelos (7-6 y 7-5).
Se clasificaron para el cuadro final Noemí Aguilar y Ari Cañellas. La pareja sufría a primera hora de la mañana con un partido en el que tocó entonar la melodía de la remontada frente a Carlotta Casali y Marta Borrero (3-6, 6-1 y 6-2) y por la tarde, más difícil si cabe; solo fueron dos parciales, pero tremendos en cuanto a pelea. Sin un solo momento de respiro ante Ksenia Sharifova y Aída González, precisaron de emplearse a fondo para ganar por 6-7 y 4-6.
Alejandra Alonso y Andrea Ustero dieron la sorpresa en la jornada, pues primero se impusieron con bastante autoridad ante Carmen García Pardo y Mónica Gómez (6-4 y 6-0) y después repitieron ante las segundas fvoritas de esta parte del torneo, Lara Arruabarrena y Sara Pujals, quienes llegaban muy exigidas de su duelo matinal y no pudieron con la mayor intensidad y revoluciones de Alonso y Ustero (6-2 y 6-0).
Y como suele ser habitual en las últimas citas, el combinado italiano de Chiara Pappacena y Giorgia Marchetti sumó como victorias sus partidos. Esta vez, sin embargo, no lo tuvo igual de asequible que en otras ocasiones y precisó de su mejor versión para impulsarse frente a Ana Varo y Nicole Traviesa (4-6, 7-6 y 1-6) y después para aguantar en defensa el ritmo que le imprimieron al juego Manuela Schuck y Marina Pinacho (6-4 y 7-5).
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