La pareja conformada por Marc Quílez y Toni Bueno será otra de las que, a partir de Vigo, tomen cada uno de sus integrantes un camino diferente.
Los dos catalanes, tras un crecimiento más que destacado empezando en pre-previas y llegando al cuadro final, creen que es el momento de buscar nuevos proyectos a pesar de su consolidación.
Tras dos años, han vivido incontables viajes, torneos y experiencias y por eso la despedida ha sido muy cariñosa y deseándose lo mejor mutuamente.
Este miércoles, frente a Edu Alonso y Juanlu Esbrí, los ganadores del torneo 500 de Alicante, afrontarán el que, de perder, será su último partido, por lo que seguro lo dejando todo en la pista para conseguir alargar su estancia.
Les deseamos mucha suerte en la nueva etapa que tienen por delante.
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