Hemos sometido a nuestro test no a una, sino a dos palas, dos de los modelos más potentes de Oxdog Padel, la firma sueca que ha llegado a nuestro país para hacerse un gran hueco y para quedarse, demostrando que tiene elementos más que de sobra para enamorar a los jugadores.
En esta ocasión nuestras »víctimas» son la Ultimate Pro Hes-Carbon y la Ultimate Pro+ Hes-Carbon, dos modelos con forma de diamante y estética muy parecida, que tienen otro punto en común: están pensadas para jugadores de nivel avanzado.
Ambos modelos cuentan con la tecnología SilentSpeed, que sirve para reducir el sonido del golpe, algo que a muchos jugadores gusta pero que, en definitiva, no es otra cosa que pérdida de potencia, con lo que consiguen que prácticamente toda la energía que aplicamos a nuestro golpe se traduzca en salida de pelota.
Las palas que probamos tenían un peso de 364 gramos la Ultimate Pro (reborde dorado) y de 367 gramos la Ultimate Pro+ (negra), no resultando nada pesadas una vez que le añadimos dos grips a cada una. Son palas que, a pesar de su forma diamante y que pudieran resultar »cabezonas», tienen un equilibrio muy bueno de pesos, algo de lo que tienen culpa los denominados Power Ribs que ya os mencionamos en anteriores testeos y que son unos surcos (en este caso en la zona alta de la pala) que les otorga un mayor balance y que sirven también para mejorar la eficiencia aerodinámica.
En su interior encontramos el mismo tipo de goma y carbono, el HES-Carbon, de reacción rápida y que le confiere esa potencia que es el punto fuerte de ambas palas, pues tanto en el smash (a pesar de ser invierno) como en las bandejas ofensivas y víboras, la bola sale con mucha rapidez y potencia.
Otra de las incorporaciones técnicas que ambas tienen es el sistema RSB, que consiste en dos pesos de 4 gramos que puedes dejar o quitar para modificar el balance de la pala y así adaptarla a tus preferencias.
Pero, ¿en qué se diferencian entonces? Aparte de en el precio, la Pro Hes Carbon cuesta 280€ y la Pro+ Hes Carbon 300€, en que el balance varía. En el caso de la primera de ellas, hemos notado este ligeramente más abajo, más tirando hacia el centro, por lo que tiene un punto de control algo más elevado que su hermana, aunque tampoco hay grandes diferencias, mientras que en la otra, al tenerlo justo en la cabeza y poseer también una goma algo más dura, es la típica pala para pegadores, de potencia total, por lo que no es apta para el manejo de cualquier jugador y requiere un nivel de juego mayor.
La Pro Hes Carbon es más universal, con una distribución de pesos que quizá puede agradar más al público porque es más polivalente, pero ambas palas, como decimos, están enfocadas a un público exigente y de nivel alto, no para principiantes ni jugadores de nivel medio.
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