No ha sido para nada una jornada tranquila en el Open de Bruselas, con continuos sobresaltos en los partidos y con una buena dosis de sorpresas, dado que algunas de las parejas con las que se contaba en el cuadro final no llegaron siquiera a disputar la final de las previas, como fue el caso tanto de la dupla cabeza de serie nº1 como de la nº2.
Una de esas duplas ha resultado ser la de los grandes favoritos, Javi Leal y Uri Botello, quienes llegaban con buenas sensaciones tras su paso por el Challenger de Albacete pero que en esta ocasión caían a las primeras de cambio con Juanlu Esbri y Javier Barahona a primera hora de la mañana, y lo hacían con mucha diferencia, demasiada, teniendo en cuenta el nombre de los cuatro contendientes (4-6 y 1-6). Por la tarde, Esbri y Barahona redondeaban su actuación con un 6-4 y 6-3 sorprendiendo también a José Solano y Jaime Fermosell, quienes a su vez habían dejado en la cuneta previamente y también en parte contra pronóstico a Aris Patiniotis y Denis Perino (7-6 y 6-4).
Raúl Marcos y Javier García Mora seguirán como mínimo hasta 1/16 de final al superar a Ignacio Vilariño y a José María Mouliaa primero por 7-6 y 6-2 y después dar otra de las campanadas del día al eliminar a Íñigo Zaratiegui y Lucas Bergamini por un peleado 6-3, 4-6 y 6-1.
Más sorpresas, esta vez de la mano de Marc Quílez y Toni Bueno, pareja que dejaba por el camino a Martín Sánchez Piñeiro y Javi Martínez por 6-3 y 6-4, y después, ya contra unos rivales más igualados a ellos por ranking, Pedro Vera y Aitor Gª Bassas (quienes en su primer partido habían sido capaces de dejar fuera de la ecuación a Miguel Semmler y José David Sánchez por 6-4, 3-6 y 2-6) volvían a vencer por un doble 4-6.
Y por último, otra campanada más, esta a cargo de Antonio Luque y Mario Del Castillo; estos dos jugadores, tras u cómodo debut frente a Javier Valdés y Christian Fuster (3-6 y 2-6), dejaban con la miel en los labios a Rafa Méndez y Salva Oria, los segundos cabezas de serie de esta parte de la competición, con dos sets muy diferentes en cuanto a números y sensaciones (7-6 y 6-2), pues uno estuvo muy parejo y en el segundo dominaron a su antojo.
Así pues, a partir de las 10 de la mañana, volveremos a tener mucho pádel en Bruselas con un cuadro final que seguro le va a la zaga en cuanto a zarpazos.
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