Para llegar a la final hubo que elegir, en el cruce, entre dos caminos. El tortuoso a la izquierda, con peligros y muchos obstáculos, y el plácido y fácil a la derecha, con una senda siempre favorable. Cada duelo eligió el suyo y por eso se vieron dos semifinales completamente opuestas en la que hubo sufrimiento total y un tranquilo paseo.
En la primera semifinal, Íñigo Zaratiegui y Lucas Campagnolo se veían las caras con el ex compañero de ‘Berga’, Lucas Campagnolo y con Javi Garrido, una pareja demoledora en el plano físico y también en cuanto a potencia. Se han juntado para optar a grandes cosas y lo demostraron desde el principio.
El primer set fue, no obstante, una batalla campal en la que el físico de unos peleaba contra la elevadísima moral de los otros debido al gran torneo que estaban gestando, máxime sin tener ya nada que perder. Íñigo y Lucas batallaban en todos lados y ofrecían una enorme resistencia a las constantes acometidas de los rivales.
Fuego cruzado e igualdad para llegar al tie break donde, ahí sí Campa y Garrido no tuvieron piedad alguna y arrollaron por completo a Zaratiegui y Bergamini.
Con el primer parcial en el bolsillo, se esperaba que mermaran las fuerzas del navarro y el brasileño, pero nada más lejos de la realidad, pues supieron rehacerse, olvidar el golpe y también los errores cometidos para de nuevo, con el mono de trabajo puesto y, el escudo y el casco, aguantar todo lo que se venía desde el otro lado de la red y darle contundente respuesta.
Otro set y otro tie break con las fuerzas totalmente parejas que, esta vez, cayó del banquillo de Lucas e Íñigo por justicia, dejándonos un tercer set como gran desenlace. Ahí sí que las fuerzas les laquearon algo más y supieron sacar provecho de la situación en mayor medida el brasileño y el cordobés, imperiales y sin concederse un minuto de descanso, dándole brío siempre a sus golpes hasta el definitivo 6-7, 7-6 y 2-6 que les convertía en primeros finalistas del torneo.
En el segundo choque no hubo tanta historia, pues Miguel Yanguas y ‘Coki’ Nieto’ borraron todas las ilusiones y aspiraciones de Javi Rico y Javi Ruiz de un plumazo. El andaluz y el madrileño les pasaron por encima cual aviones, con un pádel eléctrico como suelen que no podía contrarrestar el ritmo más pausado y de control de Rico y Ruiz.
En poco más de 40 minutos el partido lo tenían totalmente encarrilado Yanguas y Nieto, mientras que los rivales solo podían maquillarlo para que la derrota fuese menos dolorosa. Un 6-2 y 6-3 les ponía en la final y les citaba de cara a este domingo.
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