La final femenina tenía dos claras favoritas, Martita Ortega y Bea González, pero otras dos contendientes Carla Mesa y Claudia Jensen, que llegaban tras un torneo épico, de los que escriben varias páginas y se recuerdan una y otra vez.
La cita de Getafe les había sido muy propicia y buscaban la machada total más allá de las ya conseguidas (victorias ante Aranza Osoro y Victoria Iglesias, Lorena Rufo y Sofia Araújo, y ante Marta Marrero y Lucía Sainz, esta última lesión mediante), pero delante tenían a una jugadora muy apoyada por el público, Ortega, que también pasó parte de ese apoyo a su compañera andaluza. Y juntas brillaron.
Juego muy parejo de las cuatro en los primeros minutos, de tanteo estos, con Bea y Martita ofreciendo más argumentos en ataque y sus rivales en defensa, pero cómodas todas, pues ni unas lograban hacerse dueñas de la red ni las otras sufrían en demasía pegadas al cristal. Así llegaron al término del octavo juego con un 4-4 campeando en el marcador y a partir de ese momento, la producción de la jovencísima argentina y de la española de paró en seco, dándole toda la ventaja en lo que quedaba de parcial a Ortega y González, quienes se vinieron arriba y sentenciaron con un break y su saque (4-6).
En el segundo, por más que lo intentaba Jensen sacando bolas imposibles, con su revés de la escuela de las dos manos y Carla con su habitual garra y empuje, todo parecía imposible. Las de Maxi Grabiel iban en la cresta de la ola, sin freno y haciendo todo bien, siendo constantes y contundentes en las transiciones, con globos profundos, bolas pesadas al fondo de la pista y sin perderle nunca la cara al partido.
Y eso, unido a varias bolas consecutivas que erró Mesa, hicieron que el segundo set fuese coser y cantar para las cabezas de serie nº2, que finalizaron el torneo con un 4-6 y 1-6 que les convertía en campeonas del Tau Cerámica Getafe Challenger 2022, el primer torneo de esta categoría de la temporada.
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