Desgastadas físicamente, exigidas y aplicadas en el esfuerzo. Las cuatro contendientes de la batalla entre Eli Amatriain y Carolina Navarro por un lado, y Mapi y Majo Sánchez Alayeto por el otro terminaron igual, si bien dos se fueron con la victoria y las otras regresarán a casa. Pero ninguna negoció el esfuerzo.
Daba igual la edad, el desgaste previo que traían (especialmente Eli y Carol tras disputar el Challenger), solo primaba la ilusión y las ganas de alzar los brazos con el último punto. En esa pelea se veían las caras unas que buscaban sus primeros cuartos el año y otras que querían seguir con su mejoría y con su disfrutar partido a partido al no conocer lo que está por venir.
Empezaron mejor las hermanas, que rápidamente colocaron un break y su saque para un 0-2 que hacía presagiar un marcador abultado, pero Eli y Carol no son de las que se rinden y, apretando los dientes, le dieron un revolcón al luminoso para que este reflejara un 2-2 y luego se viera la respuesta contundente de las ‘Alayeto’ (2-4) que les ponía con todo a favor. Desde ahí, dominando, lograron cerrar el primer set a su favor (3-6).
En el segundo set, la iniciativa inicial fue para Amatriain y Llaguno, conscientes de que en un partido largo tenían todas las de perder por su físico más justo y por la potencia de los golpes de las gemelas y por eso quisieron cerrar rápido el segundo. Se pusieron con ventaja en el quinto juego (3-2), pero Mapi y Majo consiguieron empatar a 3, llegando así igualadas casi al tie break, cuando las de Manu Martín lograron echar el freno en defensa y trabajando mucho las piernas y la movilidad, pararon la sangría en el 7-5.
Un tercer set que se mantuvo igualado en todo momento y que al igual que el anterior, solo se rompería en la parte final, pero esta vez en favor de las zaragozanas quienes, en el noveno juego y cuando había aroma de tie break en el aire, se encargaron de conseguir un break valiosísimo que se convirtió en el 3-6, 7-5 y 4-6 final.
Eso sí, no fueron las únicas que lo tuvieron bastante en contra. No tan ajustado pero sí igualmente peleado a tres sets tuvieron el estreno en Cerdeña Alejandra Salazar y Gemma Triay. Muchas veces el problema de la falta de rodaje es lo que ocurre en estos casos y aquí fue una demostración más.
Llegaban más metidas en ritmo Vero Virseda y Lucía Martínez y les complicaron la existencia solventando a su favor un primer set que, eso sí, se decidió por mínimos detalles y que no anduvo muy lejos del tie break.
Se lo consiguieron llevar Lucía y Vero in extremis pero a partir de ahí emergieron las cabezas de serie número 1 y volaron sobre la pista. Con un parcial perfecto y otro que no estuvo muy lejos de serlo también, redondearon una remontada espectacular y acabaron venciendo por 4-6, 6-0 y 6-2.
En el resto de partidos sí que las favoritas principales se mantuvieron firmes y no dieron concesiones. Prueba de ello son las victorias de Martita Ortega y Marta Marrero sobre Anna Cortiles y Xenia Clascá (6-2 y 6-0), la de Aranza Osoro y Victoria Iglesias ante Sofia Araújo y Ana Catarina Nogueira (6-2 y 6-2), o la de Lucía Sainz y Bea González con un 6-2 y 6-3 sobre Mari Carmen Villalba y Carla Mesa.
Virginia Riera y Patty Llaguno tuvieron alguna complicación más en el set inicial ante Ari Cañellas y Léa Godallier (7-6 y 6-3) y, Delfi Brea y Tamara Icardo pudieron con dos de las revelaciones de los Challenger, Jessica Castelló y Alix Collombon (6-1 y 6-4) y Ari Sánchez y Paula Josemaría dejaron sin torneo a Esther Carnicero y Cecilia Reiter (6-3 y 6-0).
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