Vaya por delante todavía nuestra sorpresa nada más conocer la noticia en las redes sociales, algo que desde luego no esperábamos y que a todos nos ha pillado a la contra. Mapi Sánchez Alayeto comunicaba a través de sus diferentes perfiles que ha sido diagnosticada con una enfermedad, una que no se sabe cómo se comportará y cómo, cuánto y cuándo le afectará a su vida deportiva.
La jugadora zaragozana ha sido diagnosticada con Esclerosis Múltiple Recurrente Remitente, el tipo »más común» de Esclerosis Múltiple y que afecta a cerca de 2,5 millones de personas en todo el mundo y que consiste en que el sistema inmunitario ataca por error partes del sistema nervioso central, concretamente la capa (denominada mielina) que hay alrededor de los nervios; sin embargo, sorprendentemente, tu cuerpo es capaz de reparar parte del daño ocasionado a la mielina en un proceso denominado remielinización, si bien la mielina reparada no es la misma que antes de los daños, por lo que puede que los mensajes no viajen por los nervios tan rápido como lo hacían antes.
Con el tiempo, los daños pueden acumularse y puede ser demasiado difícil para el cerebro repararlos. Esto puede provocar síntomas permanentes tanto en la movilidad como en la visión, en el habla, fatiga…
Desde luego, Mapi, con todo su equipo y por supuesto con el apoyo de su hermana Majo y de toda su familia, no será de las que se rindan y decida colgar la pala tan fácilmente; peleará y seguirá intentando llegar a lo más alto a pesar de la EMRR con mucha constancia y con todo el ánimo que ha recibido también de sus compañeros, del circuito, de los medios y de los aficionados al pádel.
No podíamos terminar esta noticia sin, lógicamente, desearle lo mejor a la jugadora zaragozana. Obviamente, todo dependerá de lo que dictamine su salud, de lo que le afecte a su carrera deportiva y a su vida diaria algo que, a todas luces, es complicado de prever por las características de la enfermedad.
Lo que sí está claro es que ha de primar la salud por encima del brote, la recuperación y el bienestar de la jugadora, a la que ojalá podamos ver todavía muchas veces en la pista peleando y ganando como nos tiene acostumbrados. El pádel se lo debe y deseamos verle levantar más títulos.
Mucho ánimo y mucha fuerza, Mapi.
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